Michelle Yeoh protagoniza una secuela saturada de acción y doblaje en inglés

El auge de Ne Zha II: Un éxito global con sello chino y doblaje en inglés

El cine asiático vuelve a marcar un hito en la taquilla mundial con Ne Zha II, secuela del fenómeno animado que en 2019 recaudó más de 2.000 millones de dólares, situándose entre las cinco películas más exitosas de la historia. Aunque su estreno en Estados Unidos fue limitado, la distribuidora A24 ha relanzado el filme con un doblaje en inglés y en formatos premium como IMAX y 3D, apostando por su impacto visual como principal reclamo.

La cinta, dirigida por Jiaozi, retoma la historia basada en la mitología china y la novela La investidura de los dioses, centrándose en la tumultuosa relación entre el niño demonio Ne Zha —voz de Griffin Puatu— y el príncipe guerrero Ao Bing (Aleks Le). La trama, compleja y repleta de elementos sobrenaturales, sigue sus peripecias tras fusionarse en un mismo cuerpo, desencadenando batallas épicas entre dioses, dragones y criaturas marinas. Los guiños al humor infantil, con escenas de humor escatológico, refuerzan su atractivo para el público más joven, aunque pueden resultar excesivos para espectadores adultos.

Sin embargo, la verdadera fortaleza de Ne Zha II radica en su espectacularidad técnica. Las secuencias de acción, casi ininterrumpidas y con una animación detallada, elevan el listón del género. "Es un logro visual, aunque narrativamente caótico", señalaron críticos especializados. Destaca también la participación de Michelle Yeoh, quien presta su voz a Lady Yin, madre del protagonista, en un elenco alejado de estrellas hollywoodenses.

Mientras el cine chino consolida su influencia global, la industria occidental observa con interés. El éxito de la saga Ne Zha cuestiona el dominio tradicional de estudios como Disney o Pixar, cuyo último año ha sido menos brillante en taquilla y crítica. Con una duración de casi dos horas y media, esta secuela apuesta por el exceso: más personajes, más combates y más efectos. Un desafío para quienes buscan profundidad, pero un festín para los amantes del espectáculo animado.

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