¿Cuál es la verdadera razón detrás de las dificultades para comunicarse por teléfono en Argentina?

El problema de las comunicaciones móviles en Argentina

En el comienzo del siglo, Argentina se destacó como el primer país de América Latina en lograr una penetración del 100% en telefonía celular, con tantos dispositivos móviles como habitantes. Sin embargo, a lo largo de los años, este logro se ha visto empañado por una serie de obstáculos que han dificultado el uso efectivo de los teléfonos celulares en el país.

Con una población de 40 millones, Argentina cuenta actualmente con 62 millones de líneas de teléfonos celulares en servicio. A pesar de esta cifra, muchos usuarios han experimentado problemas al intentar realizar llamadas, con llamadas que no entran o que se cortan repetidamente durante la conversación.

Una de las principales causas de estos problemas es la escasez de espectro radioeléctrico disponible en el país, que se encuentra por debajo de los estándares recomendados por la Unión Internacional de las Telecomunicaciones. Desde 1998, el Estado argentino no ha asignado nuevo espectro para comunicaciones, lo que ha llevado a que Argentina sea uno de los pocos países de la región que aún no cuenta con redes celulares de cuarta generación, conocidas como 4G.

Además, la restricción en el uso de la tecnología 3G también ha impactado negativamente en la calidad de las comunicaciones móviles en Argentina. Con un 25% del espectro del 3G reservado pero sin uso desde 2008, los clientes de las principales compañías de telefonía celular solo pueden acceder al 75% de las frecuencias disponibles.

Ante esta situación, el gobierno argentino anunció que en noviembre se llevará a cabo una licitación para asignar el espectro 3G desocupado y las frecuencias necesarias para implementar la tecnología 4G. Sin embargo, este proceso se ha visto retrasado en el pasado por cuestiones de dejadez, presiones políticas y económicas de los interesados en el negocio de las telecomunicaciones.

Además de la falta de espectro, la colocación limitada de antenas y la falta de inversión de las empresas de telefonía móvil han contribuido a los problemas de comunicación en Argentina. Aunque las inversiones han aumentado en los últimos años, los usuarios continúan experimentando deficiencias en el servicio y aumentos en las tarifas.

A pesar de ello, se espera que con la ampliación del espectro, la instalación de más antenas y una mayor inversión en el sector, la calidad de las comunicaciones móviles en Argentina mejore significativamente en el futuro, situando al país a la altura de sus vecinos en este aspecto.