El rey Carlos planea visita a Australia tras recuperarse de cáncer

El Rey Carlos visitará Australia en medio de su recuperación del cáncer

El Rey Carlos III se prepara para visitar Australia y Samoa en octubre, en un itinerario que abarcará 12 zonas horarias y pondrá a prueba la resistencia del monarca mientras se recupera del tratamiento contra el cáncer. El viaje, anunciado el domingo por el Palacio de Buckingham, marca un momento crucial para el rey de 75 años, quien ha estado regresando lentamente a sus deberes públicos después de tomarse un descanso tras su diagnóstico de cáncer a principios de febrero. La decisión de emprender un viaje tan largo será vista como un signo de la recuperación de Carlos, a pesar de que el programa en Australia será «limitado». La visita a Australia será un momento crítico para el rey mientras intenta reforzar el apoyo a la monarquía tanto en casa como en el extranjero. Será la primera vez desde que ascendió al trono que Carlos visitará uno de los 14 países fuera del Reino Unido donde el monarca británico sigue siendo jefe de Estado, un vínculo que es motivo de orgullo para algunos pero un recordatorio no deseado de la dominación colonial británica para otros. Aunque sin duda será recibido por seguidores ondeando la bandera y cantando “Dios Salve al Rey”, es probable que Carlos también escuche voces anti-monarquía en un país donde el 45% de los votantes en un referéndum de 1999 apoyaron la creación de una república australiana. El Partido Laborista del Primer Ministro Anthony Albanese apoya abandonar la monarquía, pero el gobierno dice que no es una prioridad y no hay un plazo para otro referéndum. «Está claro que hay una verdadera reevaluación en marcha allí sobre si la Mancomunidad, y ciertamente los reinos, quieren mantener su conexión con la monarquía británica o no», dijo Ed Owens, historiador y autor de «Después de Isabel: ¿Puede salvarse la monarquía?» en una entrevista antes de que se anunciara el viaje. «Así que, ya sabes, se avecinan aguas turbulentas».

Albanese dijo que él y la Gobernadora General Sam Mostyn, la representante del monarca en Australia, darían la bienvenida a Carlos y la Reina Camila. Albanese señaló que Carlos ya había realizado 15 visitas oficiales a Australia, la más reciente en 2018. El monarca también había pasado varios meses en una escuela en una región australiana como adolescente en 1966. «El Rey tiene un profundo respeto por nuestra gran nación, y siempre ha hablado cálidamente del tiempo que ha pasado aquí y de la asombrosa belleza de nuestro extraordinario continente», dijo Albanese en un comunicado.

El palacio proporcionó pocos detalles sobre la gira. Carlos y Camila visitarán el Territorio de la Capital Australiana y Nueva Gales del Sur, además de realizar una visita de Estado más formal a Samoa, donde el rey participará en la Reunión de Jefes de Gobierno de la Mancomunidad, según informó el palacio. El territorio de la capital alberga Canberra, la capital nacional de Australia. Sídney, la ciudad más grande de Australia, está en Nueva Gales del Sur. Carlos ostenta el título simbólico de jefe de la Mancomunidad, una asociación voluntaria de 56 naciones independientes, la mayoría de las cuales tienen lazos históricos con Gran Bretaña. La reunión anual de jefes de gobierno se llevará a cabo del 21 al 25 de octubre. Sin embargo, el viaje no incluirá una parada en Nueva Zelanda. «Los médicos del Rey han aconsejado que se evite una extensión adicional del viaje de Sus Majestades en este momento, para priorizar la continua recuperación de Su Majestad», dijo el palacio en un comunicado.

Albanese dijo que la planificación para la visita aún estaba en marcha y que se proporcionaría más información en su debido momento. Isaac Jeffrey, director nacional y CEO del Movimiento de la República Australiana, el organismo principal que aboga por una república australiana con un jefe de Estado australiano, pidió una reunión con Carlos y cuestionó por qué Australia debería pagar la visita real. «Esta visita es una gran oportunidad para que todos los australianos se pregunten si la realeza británica realmente representa una democracia australiana moderna», dijo Jeffrey en un comunicado.

El viaje se produce en un momento en el que los problemas de salud de Carlos y Kate, la Princesa de Gales, han destacado los desafíos a los que se enfrenta una familia real reducida mientras el rey se compromete a reducir costos. Con menos miembros de la realeza disponibles para llevar a cabo el interminable ciclo de cortar cintas, ceremonias de premios y eventos estatales que conforman la vida de una monarquía moderna, los miembros restantes de la familia se han visto obligados a asumir más eventos. El diagnóstico de cáncer de Carlos ocurrió al mismo tiempo que la Princesa de Gales, una de las royals más populares, se sometía a una cirugía abdominal y luego anunciaba que ella también tenía cáncer. El Príncipe Guillermo se tomó un tiempo libre para apoyar a su esposa y a su joven familia. Esto dejó a Camila, la hermana del rey, la Princesa Ana, y su hermano menor, el Príncipe Eduardo, para asumir la carga. La Princesa Ana estuvo brevemente hospitalizada el mes pasado después de un accidente que se cree involucró un caballo y le dejó con una conmoción cerebral.