Sonia Van Meter: el amor más allá de la Tierra
En noviembre próximo, Jason Stanford y Sonia Van Meter celebrarán cinco años de matrimonio. Un aniversario que, para Sonia, podría marcar el comienzo de una nueva vida en otro planeta.
Sonia se autodenomina como una «aspirante marciana», con la esperanza de formar parte de la primera colonia humana en Marte en tan solo 10 años. Un sueño que la lleva a considerar dejar todo lo conocido en la Tierra atrás.
«¿Dejarías todo para irte a vivir a otro planeta? Sonia Van Meter sí lo haría», así comienza la historia de esta consultora política de 35 años, residente de Austin, Texas. Una de los 705 preseleccionados para formar parte de la colonia humana de Mars One, una organización holandesa sin fines de lucro que recibió más de 200.000 solicitudes el año pasado.
«Yo pensé ‘esto suena divertido'», dice Sonia. «No creí que hubiera la mínima posibilidad de que me seleccionaran, solo quería ser parte de ello».
Su marido, Jason Stanford, ha experimentado una montaña rusa de emociones desde que Sonia fue preseleccionada. «Al principio pensé que era algo sobre mí. Pensé ‘me estás abandonando'», confiesa Stanford. Sin embargo, con el tiempo ha llegado a comprender y apoyar las razones nobles que motivan a Sonia a embarcarse en esta aventura espacial.
La pareja, que ha sabido enfrentar críticas en las redes sociales, toma esta misión como una prueba de su amor y compromiso. «Él me dijo una vez que me amaría hasta el fin de la Tierra y más allá», comparte Sonia. «No anticipamos que eso podía incluir viajar a otro planeta».
El plan de Mars One es enviar grupos de cuatro astronautas a Marte cada dos años, comenzando en 2024, hasta alcanzar una colonia de 40 personas. El financiamiento provendrá de un programa de televisión producido por los creadores de Gran Hermano.
Para Sonia, su inspiración espacial se remonta a su infancia, cuando la serie Star Trek le enseñó sobre cooperación y superación. Ahora, su mirada se dirige al futuro, donde ve la posibilidad de realizar algo trascendental para la humanidad.
La vida en Marte no será fácil, pero Sonia está dispuesta a afrontar el reto. Junto a sus compañeros colonos, deberá aprender a cuidar un invernadero y producir su propia comida para sobrevivir en el planeta rojo.
Mientras tanto, en la Tierra, Jason Stanford se prepara para contar la historia de su valiente esposa, dispuesto a mantener viva su memoria en la historia de la exploración espacial.
Así, Sonia Van Meter y Jason Stanford siguen adelante, separados por millones de kilómetros, pero unidos por un amor que trasciende planetas.
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