Novolitio comienza labores de reciclaje de baterías de litio junto a Endesa y Urbaser.

Novolitio, la empresa creada por Endesa y Urbaser para el desarrollo de la primera planta de reciclaje de baterías de la Península Ibérica, ha dado inicio a sus operaciones de recogida y reciclaje de baterías de litio. Esta iniciativa se enmarca en un proyecto más amplio que busca mitigar las consecuencias del cierre de la central térmica de Compostilla II, contando con el respaldo del Ministerio de Transición Ecológica, la Junta de Castilla y León, las alcaldías de Ponferrada y Cubillos del Sil, así como la Universidad de León.

La planta de reciclaje, que se ubicará en el polígono industrial El Bayo en Cubillos del Sil, requerirá una inversión de 25 millones de euros en una parcela de 15.000 metros cuadrados. Una vez en pleno funcionamiento, se estima que la planta generará 49 puestos de trabajo directos, contribuyendo así a la generación de empleo en la zona.

Con capacidad para reciclar hasta 25.000 toneladas de baterías al año, la instalación de Novolitio se posiciona como una propuesta innovadora en el ámbito de la economía circular. Además, la compañía ha sido propuesta para recibir una ayuda de 1,1 millones de euros del Instituto para la Transición Justa, reconociendo así su aportación a la diversificación del tejido productivo del Bierzo y su potencial para la generación de empleo.

La tecnología de vanguardia implementada en la planta permitirá identificar y reutilizar aquellas baterías que aún tengan vida útil, mientras que el resto será sometido a un proceso de reciclaje para recuperar materias primas clave en la fabricación de nuevas baterías. Con un enfoque en la reutilización y el reciclaje responsable, Novolitio busca valorizar más del 90% de los componentes de las baterías, reduciendo así el impacto ambiental de la producción de nuevas unidades.

La propuesta de Novolitio incluye el servicio de recogida de baterías de litio en España y Portugal, para su posterior traslado a la planta en Cubillos del Sil. Una vez en la planta, las baterías serán descargadas eléctricamente, desmontadas y clasificadas para su tratamiento adecuado. Aquellas que no puedan ser reutilizadas serán sometidas a un proceso de trituración y separación, permitiendo la recuperación de materiales como aluminio, cobre, plásticos y metales estratégicos como el cobalto y el níquel, esenciales en la fabricación de baterías.

En resumen, la iniciativa de Novolitio representa un paso crucial hacia la sostenibilidad ambiental y la economía circular, promoviendo la reutilización, el reciclaje responsable y la valorización de materias primas clave en la industria de las baterías. Con el respaldo de importantes entidades y una tecnología de punta, Novolitio se presenta como un actor relevante en la transición hacia un modelo productivo más sostenible y respetuoso con el medio ambiente.