Rescatan a niño tras caer en tubería cerca de su hogar en Kansas.

Un niño pequeño ha sido rescatado tras caer por un tubo cerca de su casa en Kansas.

Los equipos de emergencia lograron sacar a un niño de 14 meses, aterrorizado y gritando, después de caer en un estrecho tubo y quedarse atrapado a unos tres metros de profundidad en el patio de su casa en Kansas.

El oficial Ronnie Wagner del Departamento de Policía de Moundridge fue escuchado en un video corporal diciendo: «Ahí vamos», claramente aliviado, mientras los equipos sacaban al niño ileso del agujero el domingo. «Está bien», añadió.

Wagner había llegado a la casa tan solo 15 minutos antes. El niño estaba llorando mientras su padre gritaba en el agujero: «¡Hey amigo! Te vamos a sacar».

Wagner explicó en una entrevista telefónica el jueves que el niño estaba jugando en el patio cuando pisó una tapa que cubría el agujero. Esta se desprendió y él cayó mientras su madre observaba.

En la escena, ella sostenía a un bebé más pequeño en sus brazos, mientras el padre del niño consolaba a ella y al hermano mayor del niño, quien también gritaba.

Pero esos gritos fueron alentadores, mostrando que estaba consciente. Además, el hecho de que el niño pudiera ponerse de pie también fue una buena señal, según Wagner.

Inicialmente, el niño se resistió a los esfuerzos del equipo de rescate para colocarle una cuerda alrededor para poder sacarlo.

«Se la quitó porque no estaba seguro de lo que estaba pasando», explicó Wagner, señalando que el niño estaba «angustiado y en pánico, con razón».

Luego, intentaron usar un tubo de PVC con un doblez en forma de L en el extremo, con la esperanza de pasarla por debajo del niño. Pero cuando eso no funcionó, Wagner transformó el tubo en el tipo de vara de captura que suele usarse para atrapar animales salvajes.

«Lo llamamos MacGyver», dijo el jefe de policía Jared Kaufman, comparando a Wagner con el héroe homónimo de la serie de televisión de los años 80, conocido por sus soluciones poco convencionales.

Wagner restó importancia al cumplido, diciendo que era la primera vez que escuchaba ese apodo. También insistió en que se necesitó todo un equipo para rescatar al niño. El jefe de bomberos asistente fue quien alcanzó el agujero y agarró al niño, mientras que el director de servicios médicos de emergencia manipulaba el tubo.

Momentos después de que el niño saliera del agujero, los médicos comenzaron a examinarlo, mientras su madre repetía: «Mamá está aquí».

Cuando Wagner miró dentro de la ambulancia minutos más tarde para verificar el estado del niño, este estaba acurrucado en los brazos de su madre. «Abrazando a su mamá», explicó Wagner, padre de dos hijos.

Wagner dijo que el niño puede tener algunos moretones, pero ni siquiera necesitó ir al hospital. Sospecha que el niño frenó su caída agitando los brazos.

Aún no se sabe cuál era el propósito del tubo, pero se sospecha que podría haber estado conectado a una bomba de sumidero en algún momento, utilizada para desviar el exceso de agua de lluvia lejos de la casa.

«Fue bastante salvaje», comentó Wagner.

Moundridge, una ciudad de alrededor de 2,000 habitantes, se encuentra a unas 40 millas (unos 64 kilómetros) al norte de Wichita.