Nuggets superan Thunder extra tiempo, triunfan clave tercer juego.

La noche del viernes dejó un sabor agridulce en Denver, donde los Nuggets lograron una trabajada victoria en la prórroga (113-104) ante los Oklahoma City Thunder, a pesar de una actuación ofensiva inusualmente discreta de su estrella, Nikola Jokic. El tres veces MVP, habitualmente impecable, sufrió una de las peores noches de su carrera en playoffs, finalizando el encuentro con 20 puntos, producto de un desalentador 8 de 25 en tiros de campo, incluyendo un 0 de 10 desde el perímetro, y acumulando ocho pérdidas de balón, una cifra que iguala su máximo en postemporada.

A pesar de sus propias dificultades en la cancha, Jokic no ocultó su alivio tras el triunfo. «Básicamente, fui el peor jugador en la cancha esta noche», admitió el pívot serbio. «Pero ganamos el partido, y eso es lo más importante». Es relevante destacar que, según análisis estadísticos, Jokic se convirtió en el primer jugador en la historia de la liga en registrar un 0 de 10 en triples y cometer al menos ocho pérdidas de balón en un mismo encuentro. Sin embargo, un crucial intento de bandeja al inicio del tiempo extra otorgó a los Nuggets una ventaja que no volverían a ceder. La defensa de Denver se intensificó notablemente en la prórroga, permitiendo a los Thunder anotar tan solo dos puntos.

Por el lado de Oklahoma City, su figura principal, Shai Gilgeous-Alexander, quien aspira al MVP de la temporada, tampoco tuvo su noche más acertada. El base canadiense terminó con 18 puntos, con un bajo porcentaje de acierto (7 de 22 en tiros de campo y un 1 de 8 en el último cuarto). Gilgeous-Alexander no logró realizar un solo tiro en el tiempo extra. «El partido se ralentiza, la ejecución importa más», comentó Gilgeous-Alexander. «En esos momentos en que el juego se ralentiza, generalmente todo se reduce a que tus mejores jugadores realicen tiros y jugadas. No hice un trabajo lo suficientemente bueno esta noche, y creo que esa es la razón principal del resultado».

Aunque las principales figuras de ambos equipos no estuvieron a su mejor nivel en la ofensiva, otros jugadores dieron un paso adelante. Jalen Williams, escolta de los Thunder, firmó su mejor actuación en playoffs con 32 puntos, la mitad de ellos concentrados en el último cuarto, incluyendo un triple que puso a Oklahoma City por delante y un par de tiros libres que ampliaron la ventaja a tres puntos.

No obstante, Denver reaccionó con una contundente racha de 14-2 para cerrar el partido, iniciada por un triple vital de Aaron Gordon que empató el marcador a falta de 28 segundos para el final del tiempo reglamentario. Este es el tercer tiro de Gordon que empata o da la ventaja en los últimos 30 segundos del cuarto cuarto en estos playoffs, incluyendo el triple que decidió el primer partido de la serie. Jamal Murray, Jamal Murray y Michael Porter Jr., los otros componentes del núcleo campeón de los Nuggets de la temporada 2022-23, también mostraron su mejor versión para compensar la atípica noche de Jokic.

Murray aportó 27 puntos, 8 asistencias y 4 robos, destacando su esfuerzo defensivo en los momentos clave. Gordon sumó 22 puntos, 8 rebotes y 5 asistencias. Porter Jr., a pesar de jugar con una lesión en el hombro izquierdo que limitaba su movilidad, contribuyó con 21 puntos y 8 rebotes. Este trío se mostró certero desde el triple, anotando 11 de los 17 intentos que realizaron, lo que resultó fundamental dada la falta de acierto de Jokic desde la larga distancia. «Es crecimiento. Es un gran crecimiento para nuestro equipo», afirmó Gordon. «Muchos chicos dieron un paso adelante. Jugamos bien. Nos muestra que somos un equipo, y así hemos sido siempre. Necesitamos a todos en esta plantilla».

Tras el encuentro, Gilgeous-Alexander esperaba con ansias la sesión de vídeo para analizar las estrategias defensivas de Denver, que lograron limitar su impacto en la cancha. Según datos disponibles, 18 de los 22 intentos de tiro de Gilgeous-Alexander fueron con un defensor pegado. En jugadas de media cancha, tuvo un registro de 4 de 18, incluyendo un 3 de 10 cuando Christian Braun ejercía como defensor principal. Desde la línea de tiros libres, solo anotó 3 de 5 intentos, ya que los Nuggets lograron evitar que penetrara la defensa con facilidad.

Gilgeous-Alexander también buscó involucrar a sus compañeros, registrando 24 posibles asistencias, un récord personal en playoffs, aunque sus compañeros solo anotaron siete de esos tiros. Reconoció haber forzado algunos tiros en el cuarto periodo, cuando Williams estaba en racha. «Honestamente, la forma en que lo veo es que vives o mueres por tus decisiones, y esta noche morí por mis decisiones», expresó Gilgeous-Alexander. «Es parte del juego. He estado en una posición en la que he hecho tiros difíciles y me han dado una palmada en la espalda después de un partido, y estoy dispuesto a asumir la responsabilidad cuando no hago la jugada correcta o fallo el tiro correcto o lo que sea. Viene con el juego. Eso viene con el territorio». A pesar de la derrota, Gilgeous-Alexander abandonó la cancha con una amplia sonrisa, que explicó como una reacción a las provocaciones de los aficionados de Denver. «Nunca quiero mostrarles que estoy derrotado o enfadado o algo así», concluyó. «Nada está escrito. La serie no ha terminado, y tenemos mucho de qué ser optimistas. No jugué como debería en el tramo final, pero tengo una oportunidad en el próximo partido y en el partido siguiente para compensarlo».