Prometedora empresa apuesta por recurso innovador para revolucionar baterías.

Expertos advierten sobre una posible escasez mundial de litio para el año 2025, lo que plantea un desafío importante en el suministro de este metal blando crucial en la fabricación de baterías para dispositivos electrónicos y vehículos eléctricos. Ante esta realidad, la empresa Group1, con sede en Texas, EE. UU., ha presentado una innovadora alternativa: la primera batería cilíndrica de iones de potasio (KIB) del mundo, que prescinde por completo del uso de litio.

Esta batería revolucionaria utiliza Kristonite Potasio como material del cátodo, ofreciendo beneficios significativos como una carga más rápida, mayor seguridad y una mayor densidad de energía en comparación con las baterías tradicionales de iones de litio y de sodio. Además, esta solución es compatible con los elementos comúnmente utilizados en la fabricación de baterías, como electrolitos, separadores y ánodos de grafito, eliminando la necesidad de metales como níquel, cobre o cobalto. Se destaca que el potasio es considerablemente más abundante que el litio en la naturaleza, lo que garantiza una mayor disponibilidad de materia prima para estas baterías del futuro.

El Grupo1 ha demostrado su capacidad innovadora al desarrollar diferentes tipos de baterías en el pasado, desde baterías de botón hasta baterías flexibles, y ahora la versión cilíndrica 18650, abriendo un amplio abanico de aplicaciones potenciales en dispositivos portátiles, powerbanks e incluso vehículos. A nivel técnico, esta batería opera a 3,7 voltios y ofrece una densidad de energía entre 160-180 Wh/kg, cifras que la posicionan como una alternativa prometedora, aunque todavía por debajo de los estándares actuales de las baterías utilizadas en automóviles.

Es importante tener en cuenta que esta batería es todavía una versión inicial del producto y continúa en proceso de mejora. El Grupo1 ha comenzado a distribuir muestras de esta innovadora batería entre los fabricantes OEM, sentando así las bases para una potencial adopción generalizada en el futuro y contribuyendo a mitigar los desafíos que plantea la posible escasez de litio en la industria de las baterías.