El equipo británico celebra medallas de bronce en los Juegos Olímpicos del 2024.

En los Juegos Olímpicos de 2024, el equipo de Gran Bretaña se vistió de bronce y alegría

El orgullo británico se desbordó en París cuando Georgia Bell subió al podio en el Estadio de Francia. En ese instante, sintió una alegría indescriptible al recibir su medalla y observar cómo la bandera británica era izada sobre la pista. Fue una noche increíble para Bell, la más asombrosa de su vida. Tras la final de los 1.500 metros, confesó a los reporteros que nunca había sido tan feliz. A pesar de que la bandera británica ondeaba ligeramente por debajo de las de Australia y Kenia, y de que se encontraba en el podio bajo Jessica Hull y más aún bajo Faith Kipyegon, para Bell, una especialista en ciberseguridad que se tomó el verano libre para estar presente en París, el color del metal no importó. Simplemente estaba feliz de vivir ese momento.

El espíritu de Bell resume la experiencia del equipo británico en estos Juegos. La perspectiva de Gran Bretaña sobre los Juegos Olímpicos de París 2024 puede ser mixta. Por un lado, se consiguieron la menor cantidad de medallas de oro (14) desde Atenas 2004, y se recordará más por las imágenes de Snoop Dogg esgrimiendo y de Simone Biles realizando acrobacias que por las hazañas del «Sábado Super» de Londres 2012. Sin embargo, bajo una mirada distinta, fue otro éxito. Se lograron un total de 65 medallas, una más que en Tokio 2020 y suficientes para igualar a Londres 2012.

El equipo británico logró medallas en cada carrera de relevos en la pista de atletismo del Estadio de Francia. Hannah Peters/Getty Images

No importó mucho para Emma Finucane que estas dos últimas medallas no fueran de oro. Las valoró de igual manera. «He estado mirando todas las mañanas», comentó levantando la almohada con las manos. «Sí, siguen ahí». De igual forma, el hecho de que Andy Murray no haya terminado su carrera con una medalla de oro no arruinó su quincena. Pasó el tiempo con los demás tenistas británicos y acumuló más pines olímpicos que nadie en la villa. Tenía 70 y contando cuando abandonó Roland Garros la semana pasada. No se sabe cuántos debe tener ahora.

Hubo momentos que fueron de plata en lugar de oro. Adam Peaty volvió a la piscina tras 14 meses personalmente difíciles, y abrazó a su hijo con fuerza después de ser superado en la línea por Nicolò Martinenghi de Italia. Aunque le habría encantado ganar el oro, amó el hecho de subir al podio. Pero significó mucho más para él haber llegado hasta allí. «No importa lo que diga el tiempo en el tablero», dijo Peaty después de la carrera. «Sé que en mi corazón ya he ganado».

El objetivo de UK Sport era alcanzar entre 50 y 70 medallas en estos Juegos, sin especificar los colores porque saben que solo añade presión a los atletas y conocen lo marginales que son las diferencias. Lo que más busca el organismo son los momentos. Las medallas son para los atletas, los momentos pertenecen a todos los que observan. UK Sport espera que inspiren a la audiencia británica a ser más activa y a aumentar la participación a nivel de base.

«Alimentados por momentos inspiradores, nuestros atletas nos han hecho sentir orgullosos y, aunque el deporte ha terminado por ahora, estoy emocionada de ver a muchos de la clase olímpica de 2024 regresar a casa y utilizar su plataforma para tener un impacto positivo en la sociedad», dijo la presidenta de UK Sport, Dame Katherine Grainger.

Es por eso que la historia de Bell, y su alegría desbordante al final, simboliza el propósito de estos Juegos. Abandonó el atletismo hace siete años debido a una lesión y una repentina falta de interés por el deporte. Llevó una vida normal: consiguió un trabajo en ciberseguridad y vio los últimos Juegos Olímpicos en el sofá. Fue un evento «Parkrun» en el Parque Bushy en Teddington, Londres, lo que reavivó su pasión y la hizo preguntarse si podía competir nuevamente. Su antiguo entrenador, Trevor Painter, que también entrena a Keely Hodgkinson, la aceptó de nuevo. Ahora sabemos que ese viaje culminaría en una medalla de bronce y alegría en el podio mientras la bandera británica se alzaba.

Más que eso, todo eso llevó a que correr y el deporte volvieran a ser parte de la vida de Bell. Incluso después de competir y que ese momento hubiera pasado, aseguró que ese era el mayor premio de todos. «Estoy muy feliz de haber vuelto a este deporte», dijo Bell. «Principalmente, estoy feliz por lo que correr me ha dado. Obviamente es increíble estar en los Juegos Olímpicos, pero cuando volví a correr, el objetivo no era llegar a los Juegos Olímpicos, eso habría sido absolutamente descabellado en ese momento, sino regresar a algo que realmente amaba».