Redacción - El Semanal
La policía alemana desmanteló una pizzería en la ciudad occidental de Dusseldorf que también entregaba cocaína como acompañamiento cuando los clientes pedían el ítem número 40 del menú.
Según el director criminal Michael Graf von Moltke, la pizza número 40 era una de las más vendidas en el establecimiento. La policía recibió la primera pista de inspectores de alimentos sospechosos en marzo. Cuando los agentes antidroga comenzaron a observar el restaurante, pronto descubrieron por qué la pizza número 40 era tan popular.
Cuando la policía llamó a la puerta del apartamento del gerente de la pizzería, este presuntamente arrojó una bolsa de drogas por la ventana, que «cayó directamente en los brazos de los agentes de policía», según informaron las autoridades de Dusseldorf. El botín incluía 1.6 kilogramos de cocaína, 400 gramos de cannabis y 268,000 euros en efectivo.
El gerente de la pizzería, quien fue liberado después de unos días de detención, reabrió su negocio rápidamente y volvió a vender la pizza número 40 con la oferta de cocaína. Esto permitió a los investigadores rastrear la cadena de suministro y, tras varias semanas de trabajo, unos 150 agentes desmantelaron una red de tráfico de drogas en el oeste de Alemania, arrestaron a tres sospechosos, incluido el jefe de la operación de 22 años, y allanaron las casas y negocios de otros 12 sospechosos.
Durante los allanamientos, descubrieron dos plantaciones de cannabis en las cercanías de Mönchengladbach y Solingen, con un total de 300 y 60 plantas respectivamente. También encontraron armas blancas, dinero en efectivo, relojes caros, entre otros objetos de valor.
El gerente de la pizzería fue arrestado cuando intentaba huir del país y permanece en custodia. Ninguno de los nombres de los sospechosos fue revelado en cumplimiento de las leyes de privacidad alemanas. La policía no reveló cuánto cobraba la pizzería por el pedido especial.
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