Según una reciente investigación publicada en el Canadian Medical Association Journal, se ha encontrado que las tasas de hipertensión y preeclampsia han aumentado en un 40 por ciento entre los años 2012 y 2021.
La hipertensión durante el embarazo es una condición médica grave que puede resultar en complicaciones tanto para la madre como para el bebé. La preeclampsia, por su parte, es una forma de hipertensión que se desarrolla después de las 20 semanas de gestación y puede causar daño a órganos como el hígado y los riñones.
Este aumento en las tasas de hipertensión y preeclampsia es motivo de preocupación para la comunidad médica, ya que puede tener consecuencias graves en la salud de las mujeres embarazadas y sus bebés. Se necesitan medidas urgentes para prevenir y tratar estas condiciones durante el embarazo.

Los expertos señalan que el aumento en las tasas de hipertensión y preeclampsia podría estar relacionado con factores como el aumento de la obesidad, la diabetes y otros factores de riesgo que pueden contribuir al desarrollo de estas condiciones. Es importante que las mujeres embarazadas reciban un seguimiento médico adecuado para detectar y tratar la hipertensión de manera oportuna.
Se espera que esta investigación genere un mayor debate sobre la importancia de la detección y el manejo de la hipertensión durante el embarazo, y que se tomen medidas para abordar este problema de salud pública de manera efectiva.

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