Redacción - El Semanal
La calma que ha caracterizado al Atlántico en cuanto a la formación de ciclones tropicales podría estar llegando a su fin. Existe la posibilidad de que una combinación de ondas tropicales y áreas de perturbación meteorológica dé lugar al próximo ciclón de la temporada, el cual llevará por nombre Debbie.
El Servicio Meteorológico de los Estados Unidos NOAA ha alertado sobre la formación de una posible tormenta tropical en el Atlántico Norte en los próximos días. De materializarse, esta sería la cuarta tormenta con nombre de la temporada de huracanes en el Atlántico y la sexta si se consideran también las tormentas del Pacífico oriental.
Esta potencial tormenta se compone de dos elementos clave. Por un lado, una onda tropical localizada al oeste de las Antillas Menores, avanzando hacia el oeste en dirección a las Antillas Mayores. Por otro lado, existe un área de baja presión sobre los Cayos, extendiéndose hacia las Bahamas y Florida, lo que puede propiciar la formación de un ciclón de relevancia suficiente como para ser nombrado.
Se ha designado el nombre «Debby» para este posible ciclón, siguiendo así la nomenclatura establecida para la temporada de huracanes del Atlántico de 2024. Las probabilidades de que esta perturbación evolucione hacia Debbie han ido en aumento, pasando del 50% inicial proyectado a un 60% en los últimos reportes de la NOAA.
La temporada de huracanes en el Atlántico ha tenido un inicio marcado por la calma, con solo una tormenta de importancia hasta el momento (Alberto). No obstante, expertos meteorólogos advierten sobre la necesidad de estar preparados ante la posible llegada de fenómenos climáticos más intensos, en parte debido al continuo incremento de las temperaturas oceánicas desde la primavera de 2023.
Además del cambio climático, se suma la posibilidad de la llegada de la fase fría del evento climatológico La Niña entre agosto y septiembre. Este fenómeno, relacionado con el calentamiento del Océano Pacífico, podría aportar a la intensificación de la temporada de huracanes en el Atlántico, especialmente durante la segunda mitad de la misma.
Ante estos pronósticos y el potencial riesgo que representan los ciclones tropicales, es fundamental mantenerse informado y preparado para hacer frente a cualquier eventualidad que pudiera surgir en las próximas semanas. La temporada de huracanes está lejos de terminar y es imperativo estar atentos a cualquier desarrollo meteorológico que pueda impactar nuestra región.
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