El Departamento de Justicia de los Estados Unidos informó que las instalaciones de detención juvenil en Texas siguen plagadas de abusos y malos tratos, incluyendo el abuso sexual, el uso excesivo de gas pimienta y el aislamiento prolongado de los menores en sus celdas. En un informe contundente publicado el jueves, se acusó al estado de violar los derechos constitucionales de cientos de jóvenes bajo custodia.
Este informe llega tres años después de que el departamento iniciara una investigación federal sobre presuntos abusos generalizados y prácticas severas dentro del Departamento de Justicia Juvenil de Texas, que recibe a cientos de jóvenes cada año.
Según la subprocuradora general de los Estados Unidos, Kristin Clarke, el personal de los centros de detención ha tenido actos sexuales con menores, los ha mantenido aislados en sus celdas durante períodos de 17 a 22 horas, y les ha rociado gas pimienta en la cara.
Clarke también señaló que aproximadamente el 80 por ciento de los menores en las instalaciones son afroamericanos o hispanos. «Esto es un problema de justicia racial», afirmó. «Nuestros niños merecen ser protegidos del daño y tener acceso a servicios esenciales».
En un comunicado, el departamento de justicia juvenil del estado dijo tener una política de «tolerancia cero» hacia el abuso y la negligencia, y haber colaborado estrechamente con los investigadores federales durante su visita en 2022.
Los representantes de la oficina del gobernador republicano Greg Abbott no respondieron de inmediato a los correos electrónicos solicitando comentarios el jueves. Sin embargo, la oficina del gobernador dijo que cooperaría con la investigación federal desde su inicio.
El informe federal señaló que las preocupaciones de salud mental, como la ideación suicida y el autolesionismo, eran ignoradas mientras los menores eran castigados rutinariamente por su comportamiento. La incapacidad de las instalaciones para abordar o tratar estos problemas constituyó una violación de la Ley de Educación para Personas con Discapacidades, según los funcionarios durante el anuncio.
El Departamento de Justicia expresó en el informe su disposición a colaborar con el estado para abordar las violaciones, al tiempo que planteaba la posibilidad de emprender una demanda federal.
En 2021, el Departamento de Justicia inició una investigación sobre las cinco instalaciones juveniles de Texas después de que defensores presentaran una queja.
Texas no es el único estado que enfrenta investigaciones federales por parte del gobierno o demandas de antiguos menores encarcelados debido a las duras condiciones en las instalaciones de detención juvenil. En mayo, se anunció una investigación federal sobre las condiciones en los centros de detención juvenil de Kentucky, tras un informe estatal que encontró problemas con el uso de la fuerza y técnicas de aislamiento. Este año se han presentado demandas en Illinois, Pennsylvania, Maryland y Nueva Jersey alegando un trato severo hacia los menores encarcelados.
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