Tim Walz enfrenta críticas por su historial militar en Guardia Nacional de Minnesota.

El gobernador de Minnesota, Tim Walz, ha sido objeto de críticas por su historial militar mientras se desempeñaba en la Guardia Nacional de Minnesota. Las críticas provienen de veteranos de la Guardia, quienes cuestionan la forma en que Walz ha presentado su servicio militar al ingresar a la política.

Walz se retiró de la Guardia Nacional en 2005 para postularse al Congreso de los Estados Unidos, justo antes de que su unidad recibiera una orden de movilización para la guerra en Irak. Durante su campaña, Walz exageró el rango que ostentaba al momento de dejar el servicio, lo que ha generado controversia entre veteranos de la Guardia. En contraste, sus partidarios elogian sus 24 años de servicio en la Guardia Nacional, donde ascendió en los rangos de tropa y recibió una licencia honorable.

Los críticos republicanos han aprovechado estas discrepancias en el historial militar de Walz para atacarlo, especialmente en su candidatura como vicepresidente junto a Kamala Harris. Algunos señalan que Walz ha sido impreciso al describir detalles clave de su período en servicio. A pesar de esto, la campaña de Harris y sus partidarios defienden a Walz, señalando que las críticas son motivadas por intereses políticos y que él ha sido un incansable defensor de los militares y veteranos.

Una de las principales controversias gira en torno al rango de «comandante sargento mayor» que Walz utilizó para describir su posición al salir de la Guardia Nacional, a pesar de que su rango real al momento del retiro era de «sargento maestro». Esta diferencia, aunque sutil para los civiles, es de gran relevancia en el ámbito militar y ha generado descontento entre algunos veteranos.

Además de las cuestiones sobre su servicio militar, Walz también enfrenta la crítica por cómo ha retratado la lucha de su familia con la infertilidad, así como por comentarios referentes a armas de guerra que ha portado en combate. Estas discrepancias han sembrado dudas sobre la narrativa personal de Walz y han sido utilizadas por sus opositores para minar su imagen pública.

En un contexto de elecciones presidenciales altamente polarizadas, la controversia en torno al historial militar de Tim Walz resalta la importancia de la transparencia y la veracidad en la presentación de la información personal, especialmente para figuras políticas de alto perfil. Mientras tanto, Walz y su campaña continúan defendiendo su legado y compromiso con la comunidad militar, buscando despejar las dudas que han surgido en torno a su historial de servicio.