Los dedos en garra, una problemática común que puede ser incapacitante
Quien sufre de problemas en las articulaciones de los pies, como es el caso de los dedos en garra, comprende lo limitante que puede llegar a ser esta condición. La deformidad de dedo en garra se caracteriza por una hiperextensión de la articulación metacarpo-falángica, que se acompaña de flexión de las articulaciones interfalángicas proximal y distal. Esta deformidad le otorga al dedo una forma curvada similar a la de una garra, como la de algunos animales, según explicaba el doctor Eduardo Rodríguez-Vellando Rubio, especialista en Cirugía ortopédica y traumatología en la Clínica Vellando de Albacete.
Desde el Ilustre Colegio Oficial de Podología de la Comunidad Valenciana (ICOPCV) señalan que la deformación de los dedos menores es uno de los problemas más comunes en los pies y puede llegar a ser incapacitante en algunos casos debido al fuerte dolor que puede provocar.
Las causas principales de los dedos en garra se relacionan con el uso de calzado inadecuado, la presencia de pies cavos y la presencia de ciertas enfermedades. «Los dedos en garra son una hiperextensión de la articulación metatarsofalángica, acompañada de una flexión de la articulación interfalángica proximal y distal. Son múltiples las causas que pueden predisponer a su aparición como es, por ejemplo, tener los pies cavos, con mucho puente», explicaba Jorge Escoto, podólogo y miembro de la junta directiva del ICOPCV.
Es crucial tener en cuenta el tipo de calzado que utilizamos, ya que puede ser un factor determinante en la aparición de esta condición. Utilizar calzado que comprime o que no respeta el ancho del pie puede favorecer que los dedos se pongan en garra. Además, las deformidades en los dedos también pueden ser síntoma de otras enfermedades como la diabetes o la artritis.
La deformidad de los dedos en garra puede manifestarse a través de dolor, irritación, inflamación y callosidades en diferentes partes del dedo. Este roce con el calzado puede provocar la aparición de helomas (callos), así como dolor en la parte dorsal del dedo y en la cabeza del metatarsiano correspondiente.
El tratamiento de los dedos en garra dependerá de si el dedo es flexible o rígido. Se pueden utilizar opciones como ejercicios de estiramiento, compresas de hielo, antiinflamatorios, inyecciones de corticosteroides, soportes plantares, ortesis de silicona, y en casos extremos, tratamiento quirúrgico. Es fundamental consultar con un podólogo para encontrar el tratamiento más adecuado y aliviar el dolor asociado a esta condición.
En resumen, los dedos en garra son una problemática común que puede resultar incapacitante si no se trata adecuadamente. Es importante prestar atención al calzado que utilizamos y buscar ayuda profesional para abordar esta condición de manera efectiva.
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