El 29 de enero de 2016 marcó un hito en la historia de la industria automotriz, especialmente en Solihull, Inglaterra, hogar de la fábrica de Land Rover. Fue el día en que el último Land Rover Defender salió de la línea de producción. El icónico Land Rover Defender resurgió posteriormente como un lujoso SUV con un precio que superaba los 100.000 euros.
Durante 68 años, el Land Rover Defender se mantuvo en producción, inicialmente conocido como Serie hasta la década de 1980, cuando se le asignaron números romanos a cada nuevo modelo. Este vehículo, con sus impresionantes capacidades todoterreno, gozaba de una reputación de indestructibilidad. Incluso al cesar su producción en 2016, se estima que aún existen alrededor del 70% de los más de 2 millones de Land Rover Defender fabricados.
Sin embargo, con la evolución del mercado y la introducción de nuevas normativas de emisiones en la Unión Europea, la demanda de vehículos todoterreno como el Defender comenzó a disminuir. Ante estos desafíos, Land Rover se vio obligado a reevaluar su estrategia y cerrar las puertas al clásico Defender para explorar el mercado de los SUV de lujo.
Jim Ratcliffe, copropietario del Manchester United y una figura destacada en el mundo empresarial británico, decidió tomar cartas en el asunto. Con una fortuna valuada en $16,7 mil millones, Ratcliffe se propuso resucitar al Defender por sí mismo a través de su empresa Ineos Automotive. A pesar de las dificultades y desafíos que implica lanzar una nueva marca de automóviles, Ratcliffe se embarcó en la ambiciosa tarea de crear un sucesor digno del icónico Defender.
El proyecto del nuevo Defender, bautizado como Ineos Grenadier, fue un proceso lleno de obstáculos y vueltas inesperadas. Inicialmente planeado para ser producido en Gales basado en motores de BMW, finalmente la producción se trasladó a Hambach, Francia. La colaboración con Magna Steyr, una empresa austriaca especializada en ingeniería automotriz, agregó un nuevo matiz al desarrollo del vehículo.
Tras lanzar versiones comerciales del Ineos Grenadier en 2022, surgieron contratiempos en relación al precio del vehículo, que superó significativamente las expectativas iniciales. La escasez de unidades en circulación generó especulaciones en el mercado de segunda mano, llegando a alcanzar precios exorbitantes.
El renacimiento del Defender a través del Ineos Grenadier es un testimonio de la complejidad y desafíos que implica la creación y consolidación de una marca de automóviles. A pesar de las adversidades, el Ineos Grenadier ha logrado destacarse como una alternativa sólida en el competitivo mercado de los SUV de lujo, rindiendo homenaje al legado del clásico Defender en la era moderna.
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