La reciente entrega de los premios Rising Star de Fashion Group International, celebrada el pasado martes, tuvo en Tiffany Haddish no solo a una anfitriona, sino también a una ferviente defensora del talento emergente. La actriz y comediante, conocida por su carisma y unapologético sentido del estilo, aprovechó la ocasión para compartir la valiosa lección aprendida de su abuela, Alice Ray, una pionera en el mundo del modelaje televisivo en los años 50.
Haddish relató anécdotas de su infancia en South Central Los Ángeles, recordando sus frecuentes quejas sobre sus atuendos. Ante estas protestas, su abuela, una figura influyente en su formación personal y estética, le inculcó un mantra poderoso: “Vístelo como si lo hubieras creado tú”. Esta frase, lejos de ser una simple instrucción sobre moda, representaba una filosofía de vida: abrazar la propia individualidad y proyectar una confianza inquebrantable, independientemente de las prendas que se lleven.
La influencia de Alice Ray trascendió la mera elección de ropa. La actriz destacó cómo su abuela le enseñó a valorar la personalidad como el accesorio más importante, afirmando que “no necesitas joyas, deja que tu personalidad sea tu joya y vístela como si la hubieras creado”. Este consejo, especialmente relevante en una sociedad centrada en la imagen y el consumo, recalca la importancia de la autenticidad y el empoderamiento personal.

Durante la gala, Haddish lució un impactante vestido halter sin espalda, creación de Cyril Verdavainne, ganador del premio Rising Star el año anterior. Este gesto no solo evidenció su buen gusto, sino también su compromiso con el apoyo a los diseñadores noveles. Haciendo eco de su experiencia personal, Haddish enfatizó la importancia de “ayudar a subir y guiar” a los jóvenes talentos, reconociendo que su propio éxito se debe, en gran medida, al apoyo que recibió en sus inicios.
La actriz, que actualmente promociona su tour de comedia “Funny and Fearless” y participa en varios proyectos cinematográficos, demostró una notable serenidad al hablar sobre sus ambiciones futuras. Con una confianza que rayaba en la certeza, Haddish admitió que siente que ya está viviendo su sueño y que los desafíos venideros son, más que fuentes de emoción, simples pasos a seguir en un camino ya trazado.
Sin embargo, la comediante concedió que la posibilidad de un encuentro personal, cuya identidad mantuvo en reserva, sí generaba cierta expectación. Haddish, consciente de la importancia de la discreción en el mundo del espectáculo y los negocios, prefirió mantener sus planes futuros bajo llave, asegurando que pronto revelará proyectos de los que estará “orgullosa”. Esta estrategia, fruto de experiencias pasadas, refleja una madurez y visión estratégica en su carrera profesional. La industria de la moda y el entretenimiento, sin duda, seguirán siendo testigos del florecimiento de una artista que parece tener claro su camino y la importancia de “vestirlo como si lo hubiera creado ella misma”.

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