Michael Flatley anuncia su candidatura a la presidencia de Irlanda

Michael Flatley anuncia su candidatura a la presidencia de Irlanda: ¿Una danza hacia el poder?

El mundo de la política irlandesa podría estar a punto de dar un giro inesperado. Michael Flatley, el icónico coreógrafo y bailarín conocido por su espectáculo Lord of the Dance, ha confirmado oficialmente su intención de postularse como presidente de Irlanda. La revelación se produjo durante una audiencia judicial relacionada con la renovación de su mansión en Cork, donde su equipo legal presentó un affidavit que detalla su decisión. Flatley, de 67 años, planea regresar a Irlanda en las próximas dos semanas para iniciar su campaña.

El artista, cuya carrera ha sido sinónimo de celebración de la cultura irlandesa en escenarios de todo el mundo, asegura que el país necesita un liderazgo más cercano al pueblo. “No creo que los ciudadanos tengan una voz real, alguien que hable su mismo lenguaje”, declaró en un reciente comunicado. Flatley, quien posee la ciudadanía irlandesa, ha mantenido contactos con mandatarios internacionales, lo que, según sus aliados, podría fortalecer su perfil diplomático.

Sin embargo, el camino hacia el Áras an Uachtaráin —la residencia presidencial— no será sencillo. Para validar su candidatura, Flatley deberá conseguir el respaldo de al menos 20 miembros del Oireachtas (Parlamento irlandés) o de cuatro consejos locales. Hasta ahora, solo dos figuras han logrado reunir las nominaciones necesarias: Mairead McGuinness, de Fine Gael, y Catherine Connolly, independiente con apoyo de partidos de izquierda.

La noticia ha generado reacciones polarizadas. Mientras algunos aplauden la llegada de una figura carismática y alejada de los círculos políticos tradicionales, otros cuestionan su falta de experiencia en el ámbito gubernamental. Incluso en el ámbito judicial, su anuncio fue recibido con escepticismo, pues los abogados de la contraparte en el caso de su propiedad lo calificaron como un intento de “cambiar las reglas del juego”.

Este movimiento también reabre el debate sobre el papel de las celebridades en la política, tras la efímera pero sonada aspiración presidencial del luchador Conor McGregor. A diferencia de McGregor, Flatley enfatiza un discurso centrado en la representatividad y la identidad nacional.

¿Podrá el Lord of the Dance convertir su leyenda artística en una victoria electoral? Irlanda, y el mundo, estarán atentos a los próximos pasos de este singular candidato.

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