La CNMC promueve competencia en gestión de residuos en España

La gestión de residuos en España se encuentra en el foco de atención de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que ha instado a favorecer la competencia en este sector. Según la CNMC, la gestión de los residuos de envases destinados al contenedor amarillo (plástico, briks, latas metálicas, etc.) y al de vidrio ha funcionado históricamente como un monopolio en España, lo que ha obstaculizado su correcto funcionamiento.

Este sector es de vital importancia debido a su impacto en la salud pública, la sostenibilidad medioambiental y la transición ecológica. La gestión de residuos implica la participación de numerosos agentes tanto públicos como privados, desde la generación de residuos en los hogares hasta su recogida, traslado, separación y clasificación por parte de los ayuntamientos y administraciones públicas.

En España, el principio de «quien contamina paga» obliga a las empresas que producen bienes envasados a hacerse cargo de los costes asociados a la gestión de los residuos de sus envases. Para ello, existen los Sistemas Colectivos de Responsabilidad Ampliada del Producto (SCRAPs) como Ecoembes y Ecovidrio, encargados de canalizar los pagos hacia los ayuntamientos por la recogida de residuos.

La CNMC ha emitido una serie de recomendaciones para favorecer la competencia en la gestión de residuos en España. Entre las medidas propuestas se encuentran la reducción de barreras de entrada para nuevos SCRAPs, el establecimiento de un marco de coordinación eficiente entre agentes públicos y privados, la promoción de la transparencia en el sistema, la prevención de conflictos de interés y el fomento de la competencia en la adjudicación de residuos a los recicladores.

En resumen, la CNMC aboga por impulsar la competencia en la gestión de residuos en España como una medida fundamental para mejorar su funcionamiento y contribuir a la sostenibilidad medioambiental y la transición ecológica en el país. Es necesario implementar medidas que favorezcan la entrada de nuevos actores en el sector y promuevan la transparencia y la eficiencia en la gestión de los residuos de envases.