En la era actual, el incremento de las compras en línea ha llevado a un aumento significativo en el envío y recepción de paquetes. Este fenómeno ha transformado la dinámica del comercio, con la presencia constante de furgonetas de reparto y puntos de recogida que representan la nueva normalidad en la distribución de productos.
Sin embargo, junto con este floreciente mercado de envíos, han surgido nuevas amenazas en forma de estafas diseñadas para aprovecharse de la ingenuidad de los consumidores. Una de las prácticas fraudulentas más comunes en el ámbito del comercio electrónico son las estafas de paquetes no deseados, también conocidas como «cepillarse los dientes». Estas estafas buscan aumentar las ventas y mejorar la posición de los vendedores mediante transacciones falsas en plataformas de comercio electrónico.
El modus operandi de estas estafas implica el envío de paquetes a usuarios que no han realizado ningún pedido previo. Para llevar a cabo este engaño, los estafadores crean perfiles falsos en plataformas de renombre como Amazon, Temu, Aliexpress o Shein, obteniendo de manera ilegal los datos personales de posibles víctimas. Posteriormente, envían paquetes de productos de bajo valor, como joyas, dispositivos electrónicos baratos o semillas, para garantizar la rentabilidad de la estafa. Una vez entregada la mercancía, solicitan a la persona estafada que deje una reseña positiva en su perfil, ampliando así la apariencia de legitimidad.
Los peligros asociados con estas estafas son múltiples. En primer lugar, los estafadores obtienen datos personales sensibles como nombres, direcciones y números de teléfono, exponiendo a las víctimas a posibles ciberataques futuros. Además, las reseñas falsas generadas de manera fraudulenta pueden conllevar la suspensión de la cuenta del usuario en la plataforma de comercio electrónico, aún sin incurrir en ninguna falta. En casos más extremos, especialmente con productos técnicos, existe el riesgo de que los paquetes contengan virus o spyware que pongan en peligro la seguridad informática del destinatario.
Ante una estafa de paquete no solicitado, la recomendación principal es rechazar la recepción del paquete y solicitar al repartidor que lo devuelva. Es importante mantenerse alerta y estar informado sobre estas prácticas fraudulentas para protegerse de posibles riesgos. La prevención y la vigilancia son la mejor defensa ante las artimañas de los ciberdelincuentes que acechan en el mundo del comercio electrónico.
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