Asturias inaugura planta de energía en depuradora de Villaperi para mejorar eficiencia.

La Consejería de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico del Gobierno de Asturias tiene planes para instalar una planta de cogeneración de energía eléctrica en la depuradora de Villaperi, ubicada en Oviedo. Esta iniciativa forma parte de un proyecto más amplio que busca convertir la depuradora en una biofactoría y centro de referencia en economía circular.

Según la consejera de Transición Ecológica, Nieves Roqueñí, el objetivo principal es aprovechar los residuos generados en el proceso de depuración de aguas residuales para convertirlos en recursos y así contribuir a la lucha contra el cambio climático y avanzar hacia una economía más circular y sostenible.

El nuevo sistema de tratamiento incluirá un proceso de biometanización de los fangos, que generará aproximadamente 2.500.000 normo metros cúbicos de biogás al año. Este biogás se utilizará para producir energía eléctrica a través de equipos de cogeneración, estimando una producción de más de cinco millones de kilovatios por hora anuales, equivalente al consumo de 1.400 hogares.

Además, se espera reducir hasta un 45% de los fangos generados en el proceso de depuración, lo que significa unas 11.000 toneladas menos de residuos al año. Esto permitirá disminuir significativamente la huella de carbono de las instalaciones. Actualmente, los fangos son enviados por carretera para su gestión en las instalaciones de Cogersa, lo que implica un alto tráfico de camiones. Con el nuevo sistema, se prevé reducir en 450 el número de camiones anuales, disminuyendo así el impacto ambiental en términos de ruido y olores.

Este tratamiento de los fangos es solo el comienzo de futuros desarrollos que podrían incluir la recuperación de nitrógeno y fósforo a través de la producción de estruvita, así como la posibilidad de generar biocarbones fuera de las instalaciones de Villaperi.

La depuradora de Villaperi es la más grande del Principado de Asturias, con una capacidad anual de tratamiento de más de 38 millones de metros cúbicos de aguas residuales, equivalente a más de 12.000 piscinas olímpicas. El proceso de limpieza de estas aguas genera anualmente una gran cantidad de residuos, incluyendo más de 1.400 toneladas de desechos de desbaste, grasas y arenas, así como más de 25.000 toneladas de fangos asociados al proceso de depuración.

Dada la magnitud de estos residuos y la cantidad de energía eléctrica necesaria para llevar a cabo los procesos de descontaminación, la depuradora de Villaperi es una de las mayores consumidoras de energía eléctrica en Asturias, con más de 11.500.000 kilovatios por hora anuales, lo que equivale al consumo de más de 3.200 hogares. La línea de tratamiento actualmente se centra en minimizar la cantidad de agua contenida en los fangos, para su posterior transporte y gestión en las instalaciones de Cogersa, lo que implica un alto volumen de transporte por carretera.