Redacción - El Semanal
En medio de la escalada de violencia entre Israel y el grupo militante Hezbollah, Canadá está tomando medidas para ayudar a sus ciudadanos a abandonar Líbano, donde recientemente una pareja de nacionalidad canadiense perdió la vida tras ser alcanzada por una bomba israelí mientras intentaban huir del conflicto en el sur del país.
Kamal Tabaja, hijo de la pareja fallecida, ha expresado su preocupación por la seguridad de sus familiares, incluido su hermano que aún se encuentra en Líbano y enfrenta dificultades para encontrar una ruta segura de salida. Tabaja ha instado al gobierno canadiense a implementar evacuaciones y proporcionar medios de transporte para sus ciudadanos en el país, ante la situación de crisis.
Mélanie Joly, ministra de Asuntos Exteriores, ha señalado que unos 45.000 canadienses podrían encontrarse en Líbano, aunque solo la mitad de ellos han registrado su presencia en la embajada en Beirut. Ante esta coyuntura, el gobierno de Canadá ha comenzado a reservar asientos en vuelos comerciales para facilitar la salida de los ciudadanos, instándolos a abandonar el país por sus propios medios mientras aún existan opciones viables.
En un esfuerzo por agilizar el proceso de evacuación, el gobierno ha asegurado 800 asientos adicionales en vuelos programados para los próximos tres días, con la próxima salida programada para el martes. Esta medida busca garantizar la seguridad de los ciudadanos canadienses, residentes permanentes y sus familias, en medio de la crisis que azota la región.
La situación en Líbano se ha vuelto aún más compleja con las estimaciones del Ministerio de Salud libanés, que indica que los bombardeos israelíes han cobrado la vida de más de mil personas en las últimas semanas, en un contexto de escalada de hostilidades entre Israel y Hezbollah. Ante la posibilidad de una ampliación del conflicto, diversos países occidentales han comenzado a implementar planes de evacuación para sus ciudadanos, incluyendo Alemania, que ha utilizado un avión militar para repatriar a sus ciudadanos.
En este sentido, Kamal Tabaja ha instado a Canadá a intensificar sus esfuerzos para evacuar a sus ciudadanos y ha solicitado una condena firme a la violencia continuada, en un llamado a proteger a la población civil de los estragos del conflicto. Desde el gobierno canadiense, no ha habido una respuesta inmediata a estas demandas, mientras Joly ha enfatizado la necesidad de un alto el fuego inmediato y ha abogado por la no proliferación de la guerra en Líbano.
La conmoción y el dolor persisten en la familia Tabaja tras la trágica pérdida de sus padres en el conflicto en Líbano. La identificación oficial de los cuerpos y su posterior entierro han sido momentos desgarradores, agravados por la imposibilidad de contar con la presencia de la familia debido a las circunstancias de desplazamiento provocadas por el conflicto.
En un intento desesperado por preservar la memoria de sus padres, Kamal destaca la generosidad y el amor que caracterizaban a la pareja, recordándolos como personas dedicadas a la familia y amantes de la naturaleza. En medio del dolor y la incredulidad, la esperanza de una pronta solución al conflicto se erige como un anhelo compartido por quienes han conocido y apreciado a la familia Tabaja.
La tragedia en Líbano ha sacudido a la comunidad internacional y generado un llamado urgente a la paz y la protección de los civiles en medio del conflicto. Mientras tanto, Canadá continúa trabajando para garantizar la seguridad de sus ciudadanos en la región, en un esfuerzo por mitigar los efectos devastadores de la violencia desatada en el país del cedro.
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