Corea del Norte planea reabrir el turismo internacional este invierno
Luego de casi cinco años de mantener sus fronteras cerradas debido a la pandemia de COVID-19, Corea del Norte tiene previsto reabrir el turismo internacional limitado para finales de 2024, según anunciaron dos compañías turísticas con conexiones en el país aislado.
Las empresas Koryo Tours, con sede en Pekín, y KTG Tours, con sede en Shenyang, realizaron anuncios separados en línea el pasado miércoles, indicando que los grupos turísticos podrán visitar la ciudad montañosa de Samjiyon, lugar considerado como el lugar de nacimiento del fallecido líder norcoreano Kim Jong Il. Ambas compañías han confirmado que la apertura oficial del turismo a Samjiyon y posiblemente al resto del país se llevará a cabo en diciembre de 2024. Detalles específicos sobre los itinerarios serán finalizados en los próximos días y semanas.
Samjiyon, situado cerca de la frontera con China y en las proximidades del pico más alto de la península coreana, el Monte Paektu, es un lugar de gran importancia histórica y simbólica para Corea del Norte y del Sur. Este volcán activo es considerado la cuna del pueblo coreano. Aunque se espera la visita de turistas extranjeros, ningún medio de comunicación norcoreano ha informado oficialmente sobre la reapertura del país a visitantes internacionales en capacidad limitada.
El turismo en Samjiyon solía ser popular entre los turistas chinos, quienes solían llegar en autobuses antes de la pandemia de COVID-19. A pesar de las sanciones internacionales impuestas a Corea del Norte por sus programas nucleares y de misiles balísticos, el turismo proporcionaba ingresos al país. El líder norcoreano Kim Jong Un ha supervisado personalmente los trabajos de construcción en Samjiyon a principios de este año, según reportes de medios estatales.
La reapertura del turismo se da después de que Kim visitara recientemente un sitio turístico en desarrollo en la costa este del país, la zona Wonsan-Kalma, que está prevista para abrir en mayo de 2025. Años de retrasos en la construcción debido a la pandemia de COVID-19 y las sanciones de las Naciones Unidas han marcado este proyecto.
Aunque Corea del Norte ha mantenido sus fronteras cerradas en gran medida durante varios años, permitiendo solo la entrada de pequeños grupos turísticos de Rusia, las recientes relaciones más estrechas entre Kim Jong Un y Vladimir Putin han dado lugar a la llegada de unos 100 turistas rusos al país. Sin embargo, la nación sigue siendo una de las más aisladas del mundo, con la mayoría de las misiones diplomáticas y organizaciones internacionales habiendo abandonado el país.
La decisión de reanudar el turismo internacional se enmarca en los esfuerzos de Corea del Norte por reactivar su economía y permitir la entrada de visitantes de naciones consideradas «amigables», como Rusia y China. A pesar de que los pasaportes estadounidenses no son válidos para viajar a Corea del Norte, a menos que sean validados de manera especial por el Departamento de Estado de EE. UU., la apertura del país al turismo internacional podría representar un cambio significativo en su política de aislamiento.
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