Figuras ocultas de la carrera espacial son premiadas por el Congreso como homenaje.

El miércoles, en una ceremonia de entrega de medallas, se honró a las figuras ocultas de la carrera espacial con el más alto honor del Congreso. Este reconocimiento destacó el papel crucial que desempeñaron estas figuras, en su mayoría mujeres afroamericanas, en el programa espacial de la NASA durante la década de 1960.

Estas mujeres, cuyas contribuciones han sido subestimadas y pasadas por alto durante mucho tiempo, desempeñaron roles fundamentales en el cálculo de trayectorias, el diseño de naves espaciales y la resolución de problemas complejos que aseguraron el éxito de las misiones espaciales de la NASA. A pesar de las barreras raciales y de género que enfrentaron, su dedicación y talento no solo abrieron nuevas fronteras en la exploración espacial, sino que también sentaron las bases para un cambio significativo en la sociedad.

El reconocimiento de estas «figuras ocultas» no solo es un acto de justicia histórica, sino también un recordatorio del valor de la diversidad y la inclusión en la ciencia y la tecnología. Su legado inspira a las generaciones futuras a perseguir sus sueños sin importar las adversidades que puedan enfrentar en el camino.

La ceremonia de entrega de medallas fue un emocionante tributo a estas pioneras, cuyas historias han sido finalmente traídas a la luz. Sus logros y su valentía merecen ser celebrados y recordados como parte integral de la historia de la exploración espacial y el progreso humano en general.

Este reconocimiento no solo resalta la importancia de la diversidad en la ciencia y la tecnología, sino que también subraya la necesidad de reconocer y valorar las contribuciones de todas las personas, independientemente de su género, raza u origen. La historia de estas «figuras ocultas» es un testimonio inspirador de la determinación, la inteligencia y la pasión que pueden llevar a cabo cambios significativos en el mundo.