Incendio en Houston: columna de fuego en ducto de gas.

Una explosión en un oleoducto cerca de Houston generó una llamarada espectacular que se alzó sobre los vecindarios durante horas el lunes, obligando a evacuaciones y órdenes de refugio y derritiendo equipos de juegos infantiles mientras los bomberos luchaban por evitar que las casas cercanas se incendiaran. Los operadores cerraron el flujo de líquidos de gas natural, pero quedaba tanto en el oleoducto de 20 pulgadas (51 centímetros) que los bomberos no pudieron hacer más que observar y rociar con agua las casas adyacentes hasta que se consuma por completo, un proceso que podría tomar horas, quizás hasta el martes, según el alcalde de Deer Park, Jerry Mouton Jr.

Las autoridades locales no especularon sobre la causa del incendio ni el papel que pueda haber tenido un automóvil quemado cerca de la fuente de la llama. El propietario del oleoducto, la empresa con sede en Dallas Energy Transfer, dijo en un comunicado que estaba «al tanto de los informes iniciales» de que un automóvil había golpeado algún equipo de válvulas, pero no ofreció más detalles.

Un bombero sufrió una lesión leve, la única reportada hasta el momento. Los bomberos fueron enviados a las 9:55 a.m., después de una explosión en una estación de válvulas en Deer Park, y justo al lado de La Porte, que sacudió las casas y negocios adyacentes. Cerca de 1,000 hogares se encuentran en el área de evacuación, según Lee Woodward, portavoz de La Porte.

«El fuego es muy intenso, por lo que muchas de las estructuras de las casas adyacentes siguen incendiándose a pesar de que estamos echando mucha agua sobre ellas», dijo Mouton. Los estudiantes en varias escuelas públicas se les indicó que se refugiaran en el lugar y las fuerzas del orden bloquearon un amplio perímetro. Algunos evacuados se reunieron en el cercano San Jacinto College, que cerró su campus después de la explosión.

Dejar que el fuego se consuma por completo es mejor desde una perspectiva ambiental que intentar atacar las llamas con algún tipo de espuma o líquido supresor, según Ramanan Krishnamoorti, profesor de ingeniería petrolera en la Universidad de Houston. Aun así, habrá sin duda consecuencias ambientales negativas, incluida la emisión de hollín, carbono y material orgánico, advirtió.

Los líquidos de gas natural se utilizan principalmente en la fabricación de plásticos y productos químicos básicos e intermedios, explicó Krishnamoorti. Houston, la ciudad más grande de Texas, es el corazón de la industria petroquímica de la nación y alberga un conjunto de refinerías y plantas, así como miles de kilómetros de oleoductos.

Las explosiones y incendios son una vista familiar en la zona, lo que plantea preguntas recurrentes sobre la adecuación de los esfuerzos de la industria para proteger al público y al medio ambiente. A pesar de que algunos residentes están acostumbrados a evacuaciones debido a la proximidad con otras plantas cercanas a la carretera, como mencionó un residente, Roberto Sánchez, «No había visto una explosión antes en los 10 años que llevo viviendo aquí».