Kamala Harris busca apoyo en Nevada con visita a Las Vegas.

La vicepresidenta de los Estados Unidos, Kamala Harris, está trabajando para convertir a Nevada en una apuesta política más segura de cara a las elecciones de noviembre. Acompañada por su compañero de fórmula, el gobernador de Minnesota Tim Walz, Harris visitó el estado el sábado, marcando la última parada de una intensa campaña en la que los demócratas están mostrando un nuevo impulso tras la salida del presidente Joe Biden de la contienda y su reemplazo por Harris en la cabecera de la papeleta electoral.

Magnolia Magat, propietaria de un restaurante de 59 años en Las Vegas, mostró su optimismo ante las próximas elecciones, expresando su apoyo a Harris debido a su capacitación y su diversa herencia como mujer negra y asiática.

En esta visita, Harris busca fortalecer su respaldo entre los votantes latinos, un sector crucial en el estado de Nevada donde en las elecciones del 2020 Biden ganó por un estrecho margen a Donald Trump. A pesar de los esfuerzos de Trump por ganar apoyo en la industria hotelera, de restaurantes y de entretenimiento, el sindicato Culinary Workers Union, que representa a 60,000 trabajadores en dicho sector, ha anunciado su respaldo a Harris.

La estrategia de Harris se centra en diferenciarse de los republicanos en temas como el acceso al aborto y las reformas al sistema de inmigración. Especialmente enfocada en criticar la gestión de Trump en la frontera sur y su posición sobre la inmigración ilegal. A pesar de las críticas de los republicanos, Harris continúa con su mensaje y su campaña en estados clave como Nevada, Arizona, Pennsylvania, Wisconsin y Michigan, buscando los votos electorales necesarios para ganar en noviembre.

En Nevada, Gail Scott, miembro del Comité Central del Partido Demócrata local, destaca el entusiasmo que Harris ha generado entre los votantes más jóvenes que podrían marcar la diferencia a nivel estatal. Por otro lado, Brian Shaw, un republicano de Nevada, considera que la candidatura de Harris dificultará la victoria de Trump debido a la supuesta incompetencia del vicepresidente. La campaña se intensifica en un ambiente político lleno de energía y rivalidades partidistas.

En resumen, la visita de Kamala Harris a Nevada no solo busca consolidar el respaldo demócrata en un estado clave, sino que también proyecta un mensaje de inclusión y diversidad que resuena entre diferentes sectores de la sociedad estadounidense, poniendo a prueba las estrategias políticas y electorales de cara a las elecciones de noviembre.