Redacción - El Semanal
El líder norcoreano Kim Jong Un supervisó una demostración de nuevos «drones suicidas» y se comprometió a impulsar el desarrollo de este tipo de armas para aumentar la preparación militar de su país, según informaron los medios estatales el lunes.
En medio de tensiones con Washington y Seúl, Kim ha estado mostrando sus crecientes capacidades militares. Las fotos norcoreanas del ensayo mostraron un dron blanco con colas y alas en forma de X que supuestamente se estrelló y destruyó un objetivo que se asemejaba al tanque de batalla principal K-2 de Corea del Sur. La mayoría de los drones de combate se mantienen alejados de los objetivos y atacan con misiles.
El ensayo, que según los medios estatales tuvo lugar el sábado, se produjo mientras las fuerzas armadas de Estados Unidos y Corea del Sur están llevando a cabo un ejercicio a gran escala destinado a mejorar sus capacidades combinadas para defenderse contra las crecientes amenazas nucleares de Corea del Norte.
Los aliados indicaron que los ejercicios, que continúan hasta el jueves, se centran en mejorar su preparación contra diversas amenazas norcoreanas y también reflejarán lecciones aprendidas de conflictos armados recientes.
La Agencia Central de Noticias de Corea del Norte informó que el ensayo del sábado involucró varios tipos de drones construidos para volar diferentes distancias y atacar objetivos enemigos en tierra y mar. Se dijo que los drones volaron a lo largo de varias rutas antes de golpear con precisión los objetivos de prueba.
Kim destacó la importancia de los drones en la guerra, citando las tendencias globales en tecnologías militares y combate moderno, y señaló que el ejército norcoreano debería estar equipado con drones avanzados «tan pronto como sea posible».
El líder norcoreano pidió acelerar el desarrollo y la producción de diversos sistemas, incluidos los «drones suicidas» que pueden ser utilizados por la infantería y las unidades de operaciones especiales, drones de reconocimiento y ataque de usos múltiples, y drones de ataque suicida submarinos, según informó la KCNA.
La animosidad en la península coreana es alta, ya que Kim utiliza la guerra de Rusia contra Ucrania como distracción mientras fortalece su ejército armado con armas nucleares y emite amenazas verbales de conflicto hacia Washington y Seúl.
Si bien la atención internacional se ha centrado en sus misiles de largo alcance diseñados para alcanzar el territorio de Estados Unidos, Kim también ha estado ampliando las armas dirigidas contra su rival Corea del Sur, principalmente misiles de corto alcance y sistemas de artillería que el Norte ha descrito como capaces de transportar armas nucleares.
A principios de este mes, Kim organizó una gran ceremonia en la capital de Corea del Norte, Pyongyang, para conmemorar la entrega de 250 lanzadores de misiles capaces de transportar armas nucleares a unidades militares en la primera línea y pidió una expansión ininterrumpida del programa nuclear militar.
Este evento aumentó las preocupaciones sobre el programa de armas de Kim, ya que demuestra su intención de desplegar armas nucleares de combate a lo largo de la frontera con Corea del Sur y afirma que su ejército podría reaccionar con ataques nucleares preventivos si percibiera que su liderazgo estaba bajo amenaza.
Los analistas señalan que Kim puede buscar aumentar la presión en un año de elecciones en Estados Unidos a medida que avanza en sus objetivos a largo plazo de obligar a Washington a aceptar la idea de que el Norte es una potencia nuclear y negociar concesiones económicas y de seguridad desde una posición de fuerza.
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