La ciudad de Ponferrada está llevando a cabo un ambicioso proyecto para ampliar su red de calor sostenible, con una inversión total de 12,5 millones de euros. Estas obras, que cuentan con un presupuesto de 2.764.551 euros, comenzaron en junio de 2024 y se espera que finalicen en abril de 2025.
Una vez completada, la red de calor sostenible de Ponferrada será capaz de satisfacer la demanda de más de 2.800 viviendas y 43 edificios terciarios, lo que implicará la desactivación de más de 100 chimeneas de combustible fósil en la ciudad. Esta nueva infraestructura contará con una capacidad de producción de energía térmica renovable de 32.000.000 kWh útiles al año, contribuyendo así a la reducción de emisiones contaminantes.
La calefacción urbana centralizada comunitaria de Ponferrada es una pieza clave en la estrategia de transición energética de la ciudad. La red utiliza biomasa forestal renovable como combustible y ya se encuentra operativa en la zona oeste de la ciudad, abasteciendo a edificios públicos y privados, como colegios, institutos, piscinas climatizadas y residencias de la tercera edad.
La central de generación de calor cuenta con una caldera de biomasa de 4.500 KW de potencia térmica en su fase inicial, la cual se ampliará en el futuro con dos calderas adicionales, alcanzando así los 18,5 MW de potencia térmica en su fase final. Este proyecto no solo contribuye a la reducción de emisiones de CO2, sino que también promueve la creación de empleo y el uso de energías renovables autóctonas.
La red de canalizaciones de distribución de calor se despliega gradualmente por distintas zonas de Ponferrada, con una longitud total proyectada de 27 kilómetros. El objetivo principal de este proyecto es proporcionar un suministro eficiente de energía térmica a los edificios, tanto públicos como privados, fomentando el uso de energías renovables y la digitalización en la gestión del consumo energético.
Además, este esfuerzo por mejorar la eficiencia energética y promover el uso de fuentes renovables en Ponferrada se enmarca dentro de una iniciativa más amplia desarrollada por la Junta de Castilla y León a través de SOMACYL. Esta entidad ha invertido más de 36 millones de euros en diferentes proyectos de redes de calor en la región, con planes de inversión futuros cercanos a los 150 millones de euros en energías renovables.
En resumen, la ampliación de la red de calor sostenible en Ponferrada no solo representa un avance significativo en términos de sostenibilidad y eficiencia energética, sino que también posiciona a la ciudad como un ejemplo a seguir en la adopción de prácticas respetuosas con el medio ambiente y la búsqueda de la autonomía energética.
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