En los días previos al trágico asesinato del líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah, se llegó a un acuerdo de alto el fuego de 21 días. Según el Ministro de Relaciones Exteriores del Líbano, Abdallah Bou Habib, Nasrallah había aceptado esta tregua propuesta por el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, y su homólogo francés Emmanuel Macron, durante la Asamblea General de la ONU.
El Ministro Bou Habib declaró en una entrevista con Christiane Amanpour de CNN que Nasrallah había mostrado su conformidad con el alto el fuego. Se comunicó que el Presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, había consultado con Hezbollah antes de tomar la decisión, la cual fue informada a las autoridades estadounidenses y francesas. Incluso, se mencionó que el asesor senior de la Casa Blanca, Amos Hochstein, estaba preparado para viajar a Líbano y negociar este acuerdo de paz.
Sin embargo, a pesar de estos avances diplomáticos, Nasrallah fue víctima de un ataque aéreo israelí en los suburbios del sur de Beirut. Este trágico evento ocurrió después de que se lanzara un comunicado conjunto instando a un alto el fuego de 21 días por parte de Estados Unidos, Francia y otros aliados internacionales.
A pesar de que fuentes occidentales confirmaron que Hezbollah había aceptado esta tregua temporal, surgen discrepancias sobre si Nasrallah personalmente había acordado el cese al fuego. Una fuente del gobierno de Biden afirmó que nunca habían tenido conocimiento directo de la postura de Nasrallah al respecto, aunque no descartaron la posibilidad de que hubiera sucedido.
En medio de esta confusión, Israel anunció su intención de continuar sus ataques contra Hezbollah, a pesar de las negociaciones diplomáticas en curso. Los esfuerzos de mediación liderados por Estados Unidos se vieron amenazados por la falta de claridad en las posiciones de las partes involucradas.
En respuesta a las críticas sobre la influencia disminuida de Estados Unidos en la región, el Ministro Bou Habib destacó la importancia de la colaboración con Washington para lograr la paz en la región. A pesar de las dificultades y los desafíos presentes, reafirmó la necesidad de contar con el apoyo de Estados Unidos en estos momentos críticos.
El trágico desenlace de Nasrallah y la controversia en torno a las negociaciones del alto el fuego ponen de manifiesto la complejidad de las relaciones internacionales en Oriente Medio. Mientras tanto, la incertidumbre y la tensión persisten en la región, recordando la fragilidad de la paz y la urgencia de encontrar soluciones diplomáticas que eviten futuros conflictos.
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