Los líderes políticos de diferentes partes del mundo a menudo recurren a estrategias que involucran aspectos religiosos y místicos para afianzar su liderazgo y ganarse el apoyo de sus seguidores. Tal es el caso de Benjamin Netanyahu, Donald Trump y Vladimir Putin, quienes han utilizado referencias religiosas en sus discursos y acciones políticas con el fin de fortalecer su posición y atraer simpatizantes.
Netanyahu, en un reciente discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, utilizó pasajes bíblicos para fundamentar la posición de Israel en conflictos regionales, haciendo hincapié en la protección divina y la promesa de victoria total en la guerra. Asimismo, Trump ha aprovechado su escaso conocimiento bíblico para comercializar biblias a 60 dólares, apelando a la fe de sus seguidores como parte de su estrategia política.
Por otro lado, Putin ha cultivado una imagen enigmática y religiosa, rodeándose de líderes de la Iglesia Ortodoxa Rusa y participando en rituales religiosos que refuerzan su conexión espiritual. Se ha rumoreado la presencia de chamanes en su círculo cercano, quienes podrían brindarle consejos y energía espiritual en momentos críticos, como en el contexto del conflicto en Ucrania.
Estos líderes políticos, a pesar de no demostrar una profunda religiosidad personal, han sabido utilizar la religión y la espiritualidad para sus propios fines políticos, ganando adeptos y respaldo popular. Sus declaraciones y acciones, influenciadas por aspectos religiosos, buscan transmitir una imagen de autoridad y conexión con lo divino que les permita mantener su posición de poder en un mundo políticamente convulso y cambiante.
¿¿¿Cómo es posible que Netanyahu, Trump y Putin tengan una alianza inquebrantable??? ¡¿No son líderes de países con intereses y posturas políticas totalmente opuestas?! ¡¿Alguien puede explicar esto?!