Redacción - El Semanal
Un nuevo estudio preliminar encontró que el riesgo de demencia aumentaba en un 14 por ciento cuando las personas consumían alrededor de una onza de carne roja procesada al día, equivalente a un poco menos de dos porciones de tres onzas por semana, en comparación con aquellas que solo consumían alrededor de tres porciones al mes.
Por otro lado, el riesgo de demencia disminuyó un 20 por ciento para aquellas personas que reemplazaron esa pequeña porción diaria de carne roja procesada por una porción diaria de nueces y legumbres.
La carne roja procesada, como el tocino, las salchichas, los hot dogs y los embutidos, a menudo contienen niveles más altos de sodio, nitratos y grasas saturadas. Estudios han demostrado que consumir mayores cantidades de estos alimentos está fuertemente vinculado al desarrollo de cáncer de colon y otros tipos de cáncer, diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares.
«Existen muchas acciones que podemos tomar para reducir los riesgos de demencia, comenzando por acciones que son conocidas por reducir los riesgos de enfermedades cardiovasculares», dijo el Dr. Walter Willett, profesor de epidemiología y nutrición en la Escuela de Salud Pública de Harvard en Boston.
El estudio fue observacional y solo puede mostrar una asociación, no necesariamente una relación de causa y efecto, según el Dr. David Katz, especialista en medicina preventiva y del estilo de vida, que no participó en el estudio.
Cada porción adicional de carne roja procesada aumentó el riesgo de demencia. Un resumen del estudio, que aún está bajo revisión para su publicación, fue presentado en la Conferencia Internacional de la Asociación de Alzheimer en Filadelfia.
Durante más de tres décadas, los investigadores recopilaron datos dietéticos de más de 130,000 participantes en el Estudio de Salud de las Enfermeras y el Estudio de Seguimiento de Profesionales de la Salud, dos grandes investigaciones sobre los factores de riesgo de enfermedades crónicas en mujeres y hombres respectivamente.
Además de la disminución del riesgo asociada con aproximadamente dos porciones a la semana de carne roja procesada, el estudio encontró un aumento del riesgo relacionado con cada porción adicional.
Otra forma de iniciar una dieta reducida en carne, según los expertos, es cocinar una comida cada semana basada en frijoles, granos enteros y verduras, utilizando hierbas y especias para dar sabor. Cuando una noche a la semana sea fácil, añade dos, y construye tus comidas sin carne a partir de ahí.
Cuando incorpores carne, utiliza piezas pequeñas de pollo o lonchas de carne magra para dar sabor a una comida a base de verduras, como un salteado.
Una medida fácil, según los expertos, es reemplazar los granos refinados por granos enteros. Opta por pan y pasta integral y reemplaza el arroz blanco por arroz integral o salvaje.
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