Los cables submarinos de Australia en alerta por amenazas, plan de protección en marcha.

En la era digital actual, es fácil concebir Internet como una entidad no física, sin embargo, la realidad nos muestra que detrás de esta red global se encuentra una infraestructura sólida y vital para su funcionamiento. El auge de los servicios en la nube en los últimos años ha destacado la importancia de los cables submarinos que conectan servidores y enrutadores en todo el mundo. Son más de mil millones de metros de cable submarino los que han pasado a ser elementos clave en consideraciones geoestratégicas, ya que controlar estas rutas se vuelve fundamental en un mundo interconectado.

Australia, en particular, se encuentra en una situación de dependencia crítica de los cables que la conectan con el resto del planeta. Con 15 cables que literalmente la enlazan con el mundo, el país ha tomado medidas para proteger esta infraestructura vital. Estos cables varían en grosor dependiendo de su ubicación, desde cables con un diámetro similar al de una manguera de jardín hasta otros más gruesos cercanos a la costa. Dotados de capas de protección que incluyen desde polietileno hasta fibra óptica, estos cables tienen la capacidad de transportar enormes cantidades de datos a través de sus líneas.

A pesar de todas las capas de seguridad, los cables submarinos continúan enfrentando amenazas constantes. Desde terremotos hasta anclas y redes de arrastre en las profundidades marinas, los enemigos de estas conexiones son variados y persistentes. Australia, en particular, ha identificado la pesca de arrastre y los ataques maliciosos como amenazas significativas para sus cables submarinos.

Consciente de la importancia crítica de estos cables para su prosperidad y seguridad, Australia ha anunciado la creación de un nuevo Centro de Conectividad y Resiliencia de Cables. Con una inversión de 18 millones de dólares en cuatro años, este centro se enfocará en brindar asistencia técnica a la región del Indo-Pacífico, así como en realizar investigaciones y análisis para desarrollar políticas y decisiones relacionadas con la protección de cables submarinos.

El futuro de los cables submarinos se vislumbra con un crecimiento sin precedentes a partir del año 2024. Se espera que se pongan en funcionamiento 78 nuevos sistemas con una inversión de 10 mil millones de dólares, cubriendo una longitud total de 300.000 kilómetros. Este crecimiento está impulsado por la demanda cada vez mayor de ancho de banda, derivada de avances en inteligencia artificial, sistemas de búsqueda, streaming de video y redes sociales.

En un escenario donde la seguridad de las comunicaciones y la protección de la infraestructura digital son vitales, la importancia de los cables submarinos como columna vertebral de la conectividad global es innegable. Australia, al igual que otros países, reconoce la urgencia de proteger estas arterias digitales para garantizar su desarrollo y seguridad en un mundo cada vez más interconectado.