El MAPA destina fondos para modernizar regadíos en Albacete.

El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) ha anunciado una inversión de más de un millón de euros en la modernización energética y digitalización de los sistemas de riego en la comunidad de regantes de Las Colleras en Fuente Álamo, Albacete. Esta iniciativa, llevada a cabo a través de la Sociedad Mercantil Estatal de Infraestructuras Agrarias (Seiasa), tiene como objetivo mejorar la eficiencia de los sistemas de riego y reducir las emisiones de CO2.

Una de las acciones contempladas en este proyecto es la construcción de una instalación solar fotovoltaica de autoconsumo con placas de última generación y alto rendimiento. Esta instalación no solo permitirá a los regantes ahorrar costes energéticos, sino que también contribuirá a la reducción de las emisiones de CO2, fomentando así una agricultura más sostenible y respetuosa con el medio ambiente.

Además, las nuevas infraestructuras beneficiarán a 324 regantes y a 1.300 hectáreas de cultivo, lo que supondrá un impacto significativo en la eficiencia y productividad de la agricultura en la zona. Estas mejoras incluirán un sistema de automatización y telecontrol que permitirá una gestión más eficiente de los recursos hídricos y una integración más efectiva en los sistemas existentes.

Es importante destacar que esta actuación forma parte del programa para la mejora y eficiencia de la sostenibilidad en regadíos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, y cuenta con la financiación de los fondos Next Generation de la Unión Europea. Esto demuestra el compromiso del MAPA y del Gobierno español en promover una agricultura más sostenible, eficiente y adaptada a los retos del siglo XXI.

En resumen, la inversión en la modernización energética y digitalización de los sistemas de riego en la comunidad de regantes de Las Colleras en Fuente Álamo, Albacete, representa un paso importante hacia una agricultura más sostenible y eficiente en la región. Estas acciones no solo beneficiarán a los regantes y a las hectáreas de cultivo, sino que también contribuirán a la reducción de las emisiones de CO2 y al fomento de prácticas agrícolas más respetuosas con el medio ambiente.