Redacción - El Semanal
En un reciente desarrollo sorprendente, un ex funcionario saudí ha acusado al príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman, de falsificar la firma de su padre en el decreto real que dio inicio a la guerra estancada de años de duración contra los rebeldes hutíes de Yemen.
Según la información proporcionada por Saad al-Jabri en una entrevista con la BBC, el príncipe Mohammed bin Salman habría firmado el decreto de guerra en lugar de su padre, el rey Salman, provocando así una serie de acusaciones y revelaciones sin precedentes. A pesar de la falta de pruebas concretas que respalden estas afirmaciones, Arabia Saudita no ha respondido a las preguntas planteadas al respecto.
Al-Jabri, un ex mayor general y oficial de inteligencia que actualmente reside en el exilio en Canadá, ha sido objeto de constantes disputas con el reino saudí, culminando en la detención de sus dos hijos como medida de presión para obligarlo a regresar al país. En este sentido, al-Jabri también ha denunciado que el príncipe heredero tiene la intención de asesinarlo.
Estas acusaciones surgen en un momento en que el príncipe Mohammed bin Salman ejerce un papel predominante en Arabia Saudita, representando a menudo al país en reuniones internacionales en lugar de su padre, el rey Salman. Su comportamiento enérgico, especialmente al comienzo de la guerra en Yemen en 2015, ha dado lugar a una amplia represión de cualquier disidencia percibida que pudiera desafiar su gobierno.
Al-Jabri reveló que un funcionario vinculado al Ministerio del Interior saudí le confirmó que el príncipe Mohammed firmó el decreto de guerra en lugar de su padre, quien fungía como ministro de Defensa en ese momento. Esta afirmación desencadenó una serie de eventos que llevaron a una operación terrestre autorizada por un presunto decreto real falsificado, según las declaraciones del ex funcionario.
La guerra contra los rebeldes hutíes en Yemen, respaldados por Irán, ha resultado en una crisis humanitaria devastadora que ha causado la muerte de más de 150,000 personas. La prolongada duración del conflicto, en medio de promesas iniciales de una resolución rápida por parte del príncipe heredero, ha generado críticas y preocupaciones a nivel internacional.
La acusación de falsificación de firma y las denuncias de intentos de asesinato por parte del príncipe heredero han llevado a Al-Jabri a presentar una demanda en un tribunal federal de Estados Unidos, buscando justicia y protección para él y su familia. Las implicaciones de estas revelaciones podrían tener un impacto significativo en la dinámica política de la región y en las relaciones internacionales de Arabia Saudita.
A medida que esta historia continúa desarrollándose, la comunidad internacional observa de cerca los eventos que rodean a uno de los líderes más influyentes del Medio Oriente, generando preocupaciones sobre la estabilidad y la transparencia en el reino saudí.
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