Incendio en Los Ángeles obliga a evacuaciones en la zona residencial.

Una gran cantidad de hogares y edificaciones se vieron amenazados el domingo por un incendio forestal descontrolado que afecta a las colinas de un bosque nacional al este de Los Ángeles, en medio de una ola de calor que ha llevado las temperaturas a tres dígitos en toda la región. Los bomberos estatales informaron que 8.733 estructuras estaban en peligro, incluyendo viviendas unifamiliares, edificios comerciales y multifamiliares. El incendio, conocido como Line Fire, consume zonas en los límites del Bosque Nacional de San Bernardino, a aproximadamente 105 kilómetros al este de LA. Hasta la mañana del domingo, el incendio había arrasado alrededor de 70 kilómetros cuadrados de pastizales y matorrales, dejando una densa nube de humo oscuro sobre la zona.

Las autoridades del condado declararon el estado de emergencia el sábado por la noche. «Las temperaturas extremas, el viento y los rayos han permitido que el incendio se propague rápidamente», indicó el condado en un comunicado. Se espera que más bomberos lleguen el domingo. Funcionarios estatales señalaron que la vegetación en la zona está críticamente seca y que las temperaturas superaron los 39 grados Celsius el sábado, con una humedad relativa muy baja, condiciones ideales para el crecimiento del fuego. El incendio se inició el jueves por la noche y la causa está siendo investigada. Cerca de 500 bomberos combaten las llamas, apoyados por helicópteros que arrojan agua sobre viviendas y colinas, así como aeronaves. El incendio generó densas columnas de humo y las llamas podían divisarse sobre las crestas de las colinas. No se han reportado heridos y no se han registrado daños o destrucción de viviendas u otras estructuras.

El Servicio Nacional de Meteorología de Estados Unidos informó que el centro de Los Ángeles alcanzó una temperatura máxima de 44 grados Celsius el viernes, marcando la tercera vez desde 1877 que se registra una temperatura tan alta en esa zona. La situación continúa siendo monitoreada de cerca por las autoridades locales y los equipos de bomberos desplegados en la zona. A pesar de la magnitud del incendio y las difíciles condiciones climáticas, hasta el momento se ha logrado evitar daños materiales significativos, gracias al arduo trabajo y la coordinación de los equipos de emergencia.