La Vicepresidenta de los Estados Unidos, Kamala Harris, adoptó un tono mesurado durante una entrevista con periodistas afroamericanos, en la cual evitó mencionar directamente a Donald Trump. Esta actitud contrasta fuertemente con la aparición altamente polémica del expresidente ante el mismo grupo recientemente. Harris, que asumió la presidencia del partido Demócrata en julio, criticó repetidamente a Trump por su manejo de la pandemia de COVID-19 y su oposición al acceso al aborto, pero siempre procuró referirse a él como el «ex presidente» y encontró maneras de evitar mencionarlo directamente.
La sesión con la Asociación Nacional de Periodistas Afroamericanos fue una de las pocas entrevistas extensas que Harris ha concedido hasta el momento. En contraste, Donald Trump ha intensificado su campaña, especialmente después del segundo aparente intento de asesinato en su contra el domingo pasado. El ex presidente ha continuado con sus amenazas de represalias contra trabajadores electorales y donantes, mientras intenta sembrar temor sobre la integridad de las próximas elecciones de 2024.
Durante la entrevista, Harris fue cuidadosa en sus respuestas, evitando dar por sentado el apoyo de los votantes afroamericanos y sin comprometerse en relación a las reparaciones propuestas por algunos demócratas en el Congreso para compensar a los descendientes de esclavos por el trabajo no remunerado de sus ancestros. Por otra parte, el presidente Biden ha respaldado al menos la idea de estudiar estas reparaciones.
Mientras tanto, tras el incidente en el campo de golf de Florida donde Trump estuvo presente, Harris contactó al ex presidente para verificar su estado, reiterando su condena a la violencia política en el país. Por su parte, Trump ha acusado sin pruebas a Harris y Biden de inspirar el último ataque en su contra, a pesar de su propia historia de retórica inflamatoria y sus llamados a encarcelar o procesar a sus enemigos políticos.
En conclusión, la diferencia evidente en el tono y la forma de abordar la política por parte de Kamala Harris y Donald Trump resalta las contrastantes perspectivas y enfoques que ambos líderes mantienen. Mientras Harris opta por un tono más moderado y cauteloso, Trump continúa con su retórica incendiaria y confrontacional. Todo esto, en el marco de una contienda electoral que se anticipa sumamente reñida, con un énfasis en áreas clave como el Medio Oeste industrial y estados indecisos como Pensilvania y Carolina del Norte.
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