Redacción - El Semanal
En medio de una creciente revuelta interna dentro del Partido Liberal, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, enfrenta un escrutinio sobre su liderazgo. Hasta 30 miembros del Parlamento Liberal han suscrito un documento interno instando a Trudeau a renunciar, lo que se espera que sea discutido en la próxima reunión de caucus el miércoles.
Ante esta situación, varios ministros del gabinete han mostrado un frente unido en apoyo a Trudeau. Marci Ien, ministra de la Mujer, Igualdad de Género y Juventud, expresó su respaldo de manera inequívoca al primer ministro, destacando la diversidad de opiniones dentro del partido pero reafirmando su apoyo a Trudeau en su liderazgo del Partido Liberal y del país.
Por su parte, el ministro de Salud, Mark Holland, mencionó que estos son tiempos difíciles para liderar, pero que él y la mayoría de sus colegas tienen plena confianza en Trudeau. Destacó la capacidad del primer ministro para enfrentar situaciones complicadas y liderar en momentos de crisis.
La ministra de Patrimonio, Pascale St-Onge, también expresó su respaldo total a Trudeau, asegurando que todo el gabinete está detrás del primer ministro y reconociendo su liderazgo en tiempos adversos.
El aumento de la presión sobre los Liberales de Trudeau se ha hecho evidente desde el verano, con dos importantes derrotas en elecciones parciales y la retirada del apoyo del NDP en el acuerdo de suministro y confianza el mes pasado. Además, encuestas exclusivas de Ipsos para Global News han mostrado un apoyo en declive para Trudeau y su gobierno.
El ministro de Inmigración, Marc Miller, calificó la atención sobre el liderazgo de Trudeau como «basura» y como una distracción para enfocarse en derrotar a los Conservadores en las próximas elecciones. Destacó la importancia de demostrar a los canadienses las fortalezas del partido y no perder tiempo en cuestiones internas.
La semana pasada, cuatro ministros más del gabinete informaron a Trudeau que no buscarán la reelección, sumándose a una creciente lista de renuncias en el gabinete y en el Parlamento. A pesar de estas salidas, tanto los ministros que renuncian como el resto del gabinete han manifestado su apoyo unánime a Trudeau para que continúe como líder.
El debate interno sobre el liderazgo de Trudeau continúa, con diferentes posiciones dentro del partido. Sean Casey, uno de los parlamentarios que ha firmado el documento interno pidiendo la renuncia de Trudeau, considera que sería en interés nacional que el primer ministro dimitiera para evitar un gobierno Conservador liderado por Poilievre.
En este sentido, el ministro de Recursos Naturales, Jonathan Wilkinson, señaló que si bien la mayoría de los miembros del partido no comparten esa opinión, es importante mantener el diálogo al respecto. Reconoció la preocupación existente dentro del caucus Liberal y la necesidad de abordarla de manera constructiva.
Ante la incertidumbre y las divisiones internas, antiguos líderes políticos como la ex primera ministra de Columbia Británica, Christy Clark, han expresado su interés en participar en la discusión sobre el futuro del Partido Liberal en caso de que Trudeau decida dar un paso al costado.
En conclusión, la situación actual en el Partido Liberal de Canadá refleja un momento de tensiones internas y desafíos para el liderazgo de Justin Trudeau. A medida que se acercan las próximas elecciones, el partido se enfrenta a la necesidad de mantener la unidad y la fortaleza ante las críticas internas y externas.
Considero que los ministros que respaldan a Trudeau muestran una falta de sensibilidad hacia las críticas legítimas que se le han hecho. Es importante recordar que en una democracia sana, la rendición de cuentas es fundamental y nadie debe estar exento de ella, ni siquiera el primer ministro. Creo que el gobierno debería escuchar y reflexionar sobre las preocupaciones planteadas en lugar de cerrarse a la crítica. Esperemos que en el futuro se priorice el diálogo constructivo por encima de la lealtad ciega.