Fallece Nguyen Phu Trong, emblemático líder político a los 80 años

Nguyen Phu Trong, secretario general del Partido Comunista de Vietnam y el político más poderoso del país, falleció a los 80 años tras meses de problemas de salud, según reportó un medio oficial el viernes. Trong, nacido en 1944 en Hanoi, desempeñó un papel dominante en la política vietnamita desde 2011, consolidando el poder del Partido Comunista en el sistema político de partido único de Vietnam. Durante su mandato, trabajó para fortalecer la posición del partido frente al ala gubernamental liderada en ese momento por el primer ministro Nguyen Tan Dung.

El difunto líder vietnamita, conocido por su ideología marxista-leninista, consideraba la corrupción como la mayor amenaza para la legitimidad del partido. En 2016, después de ser reelegido como jefe del partido, Trong afirmó que «un país sin disciplina sería caótico e inestable». Bajo su liderazgo se llevó a cabo una amplia campaña contra la corrupción, conocida como el «horno ardiente», que afectó tanto a empresarios como a líderes políticos. Desde 2016, miles de funcionarios del partido han sido disciplinados, incluidos ex presidentes, ex jefes de parlamento y miembros prominentes de la clase política.

La muerte de Trong ha dejado un vacío político en Vietnam, y aunque el presidente To Lam es considerado como el posible próximo jefe del partido, se anticipa un periodo de incertidumbre debido a la fragilidad de las normas e instituciones políticas del país. La desaparición de Trong plantea desafíos para mantener el equilibrio de poder entre las facciones dentro del Partido Comunista, lo que podría desencadenar tensiones y disputas internas.

La influencia de Trong se extendió más allá de Vietnam, siendo reconocido internacionalmente por líderes como el Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, y el Presidente de los Estados Unidos, Joe Biden. A pesar de su legado mixto, marcado por la erosión de las instituciones del partido como resultado de la campaña anticorrupción, su muerte representa el fin de una era en la política vietnamita y plantea interrogantes sobre el futuro del país en un escenario de incertidumbre política.