Redacción - El Semanal
En un foro internacional celebrado en París, se recaudaron alrededor de mil millones de dólares en promesas de ayuda humanitaria y apoyo militar para Líbano. Esta iniciativa busca brindar asistencia a un país que ha sido afectado por un conflicto armado entre miembros de Hezbollah e Israel, el cual ha provocado el desplazamiento de un millón de personas, más de 2.500 muertes y una profunda crisis económica, según informaron los organizadores franceses.
Durante su discurso de clausura, el ministro de Relaciones Exteriores de Francia, Jean-Noel Barrot, anunció que se lograron recaudar 800 millones de dólares en concepto de ayuda humanitaria y 200 millones de dólares para las fuerzas de seguridad, sumando un total de mil millones de dólares. Más de 70 naciones y organizaciones internacionales participaron en esta conferencia en París.
El presidente francés, Emmanuel Macron, hizo un llamado a los participantes para brindar «una ayuda masiva» en apoyo al país, comprometiéndose Francia con 100 millones de dólares. Por su parte, Estados Unidos se comprometió a contribuir con aproximadamente 300 millones de dólares, según mencionó Barrot.
Alemania anunció una contribución total de 96 millones de euros en ayuda humanitaria tanto para Líbano como para el vecino Siria, también afectado por la escalada de violencia en Oriente Medio. Además, Italia anunció esta semana una ayuda adicional de 10 millones de euros (unos 10,8 millones de dólares) para Líbano.
Las Naciones Unidas habían estimado previamente que las necesidades humanitarias urgentes en Líbano ascendían a 426 millones de dólares. No obstante, se advierte que la entrega de ayuda podría ser un desafío debido a la creciente dependencia del país en una economía informal y en efectivo, lo que aumenta los riesgos de falta de transparencia y corrupción.
El objetivo de la conferencia en París también incluyó coordinar el apoyo internacional para fortalecer las fuerzas armadas de Líbano con el fin de que puedan desplegarse en el sur del país como parte de un posible acuerdo para poner fin a la guerra. Dicho acuerdo podría implicar la retirada de las fuerzas de Hezbollah en la frontera.
Este apoyo al ejército libanés incluye «asistencia en materia de salud, combustible, pequeño equipamiento, pero también apoyo al plan de reclutar al menos 6.000 soldados adicionales y facilitar el despliegue de al menos 8.000 soldados adicionales en el sur», mencionó Macron.
La conferencia de París también busca ayudar a restaurar la soberanía de Líbano y fortalecer sus instituciones. El país, donde Hezbollah opera efectivamente como un estado dentro de otro estado, ha estado sin presidente durante dos años, mientras que las facciones políticas no logran ponerse de acuerdo en uno nuevo.
El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, en un video pregrabado, instó a los líderes libaneses «a tomar medidas decisivas para garantizar el adecuado funcionamiento de las instituciones estatales a fin de hacer frente a los urgentes desafíos políticos y de seguridad del país».
El primer ministro interino de Líbano, Najib Mikati, instó a la comunidad internacional a actuar ante la devastación provocada por la guerra en el país, haciendo hincapié en el impacto humano, la devastación de la infraestructura y la economía causada por la agresión israelí.
En el contexto de la crisis, el gobierno libanés, afectado por la crisis económica, se encuentra desbordado y enfrenta una mayor demanda en su sistema de salud. La falta de defensas aéreas y un arsenal envejecido han dejado al ejército libanés en una posición vulnerable frente a las incursiones israelíes y el enfrentamiento con Hezbollah.
En cuanto a las fuerzas de paz de la ONU, los participantes de la conferencia discutieron cómo apoyar la misión de mantenimiento de la paz de la ONU, UNIFIL, que cuenta con 10.500 soldados. Italia, que tiene más de 1.000 tropas en UNIFIL, aboga por fortalecer la fuerza de paz para «poder hacer frente a la nueva situación sobre el terreno».
Los esfuerzos coordinados por Francia, con su influencia diplomática y sus lazos históricos con Líbano, cobran relevancia en la respuesta a los desafíos que plantea la guerra en la región. La coordinación de la ayuda humanitaria y el fortalecimiento de las fuerzas armadas libanesas y UNIFIL son fundamentales para alcanzar una paz sostenible y estabilidad en la frontera entre Líbano e Israel.
¡Qué maravillosa noticia la recaudación de US$1B para Líbano en el foro de París! Es genial ver cómo la solidaridad internacional puede brindar una nueva esperanza económica a un país que tanto lo necesita. Esperemos que estos fondos se utilicen de manera transparente y efectiva para reconstruir y fortalecer la economía libanesa. ¡Un paso positivo en medio de tiempos difíciles! 🌍💪🏼