Gobierno francés critica el uso desmedido de fuerza en desalojo de jóvenes judíos

Ministros franceses denuncian el "uso excesivo de la fuerza" en la expulsión de jóvenes judíos de un vuelo

Una fuerte polémica ha surgido en Francia tras la controvertida expulsión de un grupo de jóvenes judíos de un avión, incidente que ha llevado a varios miembros del gobierno galo a criticar abiertamente lo que han calificado como "actuación desproporcionada" por parte de las autoridades. Los hechos, ocurridos en el aeropuerto de Lyon Saint-Exupéry, han generado un intenso debate sobre los límites de la seguridad aeroportuaria y la discriminación religiosa.

Según fuentes cercanas a los afectados, los jóvenes, que vestían kipás y portaban objetos religiosos, fueron retirados del vuelo tras una discusión con tripulantes de la aerolínea. Aunque las versiones varían, algunos testigos aseguran que el personal de la compañía les acusó de "comportamiento perturbador" sin que mediara provocación alguna. La situación escaló rápidamente cuando agentes de seguridad procedieron a retirarlos del avión, lo que derivó en enfrentamientos físicos y la detención temporal de varios pasajeros.

El ministro del Interior francés ha expresado su "profunda preocupación" y ha ordenado una investigación exhaustiva para esclarecer si existió un trato discriminatorio hacia el grupo. Paralelamente, organizaciones judías han denunciado un aumento de la intolerancia en espacios públicos, señalando este incidente como un ejemplo alarmante.

Desde la aerolínea implicada, sin embargo, se ha defendido la legalidad de las acciones, argumentando que se actuó bajo protocolos de seguridad estándar y negando cualquier sesgo religioso. "Nuestro personal está entrenado para garantizar la seguridad de todos los pasajeros, sin excepciones", señaló un portavoz en un escueto comunicado.

El caso ha reabierto en Francia el debate sobre la convivencia entre la laicidad del Estado y las expresiones religiosas en espacios públicos, un tema especialmente sensible en un país donde la comunidad judía ha reportado crecientes tensiones en los últimos años. Mientras las investigaciones avanzan, las críticas por el presunto exceso de fuerza podrían tener repercusiones legales y políticas en un contexto ya marcado por la polarización social.