Redacción - El Semanal
En un esfuerzo por combatir el calentamiento global y mejorar la calidad del agua, la empresa «Planeta Brillante» se ha destacado por su innovadora técnica de cultivo de algas en grandes cantidades. Con sede en Londres, esta compañía ha establecido instalaciones en África y Asia con el fin de cultivar, secar y enterrar algas en zonas remotas del desierto.
El proceso de «Planeta Brillante» consiste en cultivar algas en estanques con agua bombeada desde las profundidades del océano. Tras algunas semanas de crecimiento, las algas son cosechadas y se convierten en «copos con alto contenido de sal» al secarse sobre la arena del desierto, para luego ser enterradas lejos de fuentes de agua.
La principal motivación detrás de este proceso radica en la capacidad de las algas para absorber dióxido de carbono durante la fotosíntesis. Según la empresa, las algas son entre 10 y 50 veces más eficientes que las plantas terrestres en la fijación de este gas de efecto invernadero.
La empresa estima que por cada 600 kilogramos de algas enterradas, se logra eliminar aproximadamente una tonelada de dióxido de carbono de la atmósfera. Este método, que no altera la composición química del agua marina utilizada, busca preservar el dióxido de carbono secuestrado durante períodos prolongados, contribuyendo así a la mitigación del cambio climático.
A través de su planta piloto en Akhfenir, en funcionamiento desde 2018, «Planeta Brillante» ha logrado eliminar significativas cantidades de dióxido de carbono. La empresa planea expandir su capacidad de eliminación de carbono para alcanzar 1 millón de toneladas por año en 2030, con la construcción de una base de demostración para mostrar su tecnología.
La ubicación en el desierto presenta ventajas económicas y ambientales para la empresa, que planea vender créditos de carbono para financiar sus operaciones y expansión. Así, «Planeta Brillante» ha logrado asociarse con organizaciones para eliminar toneladas de dióxido de carbono en los próximos años.
En conclusión, la innovadora técnica de «Planeta Brillante» en el cultivo, secado y entierro de algas en el desierto se presenta como una potencial solución para reducir las emisiones de dióxido de carbono y combatir el cambio climático. Con metas ambiciosas y resultados alentadores, esta empresa se posiciona como un actor clave en la lucha por un futuro sostenible.
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