Las autoridades de seguridad austriacas informaron el jueves que el principal sospechoso de los arrestados en un complot frustrado para atacar los conciertos de Taylor Swift en Viena ha confesado plenamente sus planes de «matar al mayor número posible de personas fuera del lugar del concierto».
Según los funcionarios, el sospechoso de 19 años, cuando comenzó a trabajar en sus planes de ataque en julio, renunció a su trabajo habitual y «cambió notablemente su apariencia y se adaptó a la propaganda del Estado Islámico».
El jefe de la Dirección de Seguridad del Estado e Inteligencia, Omar Haijawi-Pirchner, afirmó que el joven quería usar cuchillos o explosivos caseros fuera del Estadio Ernst Happel para matar al mayor número de personas posible.

«Había sido claramente radicalizado en la dirección del Estado Islámico y consideraba correcto matar a los infieles», dijo Haijawi-Pirchner.
Además, las autoridades encontraron material del Estado Islámico y Al-Qaeda en la casa del segundo sospechoso, un austriaco de 17 años, que había sido empleado por una empresa de servicios en el lugar de los conciertos y fue arrestado cerca del estadio.
El Ministerio del Interior confirmó que no se buscan otros sospechosos y que se interrogó a un joven de 15 años que había estado en contacto con ambos detenidos.
La cancelación de los tres conciertos de Taylor Swift esta semana devastó a los fanáticos de todo el mundo, muchos de los cuales habían gastado miles de euros en viajes y hospedaje en la costosa capital de Austria para los espectáculos agotados en el Estadio Ernst Happel.
La cancelación de los conciertos causó una gran conmoción entre los seguidores, sin embargo, las autoridades austríacas resaltaron que gracias a la cooperación policial y de inteligencia, se pudo evitar una tragedia.
Taylor Swift se espera que actúe en el estadio de Wembley en Londres en cinco conciertos entre el 15 y el 20 de agosto para cerrar la etapa europea de su exitosa gira «Eras Tour».

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