La cultura del perfume ha experimentado una transformación significativa en los últimos años, evolucionando de un nicho especializado a una comunidad en expansión que despierta un gran interés. Este auge se debe en parte al confinamiento provocado por la COVID-19, durante el cual las ventas de perfumes de lujo aumentaron un 82% en la primera mitad de 2021, según datos de Circana.
En ciudades como Nueva York, surgieron eventos como el organizado por la boutique de perfumes Stéle, donde entusiastas del perfume, conocidos como «frag heads», se reúnen para compartir sus pasiones. En estos encuentros, los asistentes intercambian muestras de perfumes y entablan conversaciones apasionadas sobre fragancias.
La comunidad en torno al perfume se ha vuelto más accesible gracias a la proliferación de contenido en línea. Podcast como «Perfume Room» y «Smell Ya Later» han jugado un papel crucial en este sentido, permitiendo a los aficionados compartir sus experiencias y conocimientos sobre perfumes.

Además de los podcast, las redes sociales han democratizado el conocimiento sobre perfumes, permitiendo a cualquier persona con una conexión a internet explorar y compartir información sobre este mundo. Plataformas como TikTok han sido especialmente influyentes, con creadores de contenido como Luca Mornet, quien cuenta con más de 400.000 seguidores y comparte reseñas detalladas de perfumes.
La colección de perfumes de Scentbird, una plataforma de suscripción de perfumes, ha experimentado un crecimiento notable, pasando de 350.000 suscriptores a más de 1 millón en solo cinco años.
Los eventos presenciales, como los «scent swaps» organizados por entusiastas del perfume, han vuelto a ganar popularidad. En estos encuentros, los participantes intercambian perfumes auténticos y comparten sus experiencias con diferentes fragancias.
La industria del perfume también ha visto un aumento en la colaboración entre marcas y creadores de contenido. Por ejemplo, la marca Clue ha organizado eventos de lanzamiento de perfumes que combinan la presentación de nuevos productos con experiencias inmersivas para los asistentes.
En este contexto, surge una nueva generación de coleccionistas de perfumes que buscan experiencias únicas y exclusivas. Algunos de estos coleccionistas, como Luca Mornet, se refieren a sus perfumes favoritos como sus «Infinity Stones», simbolizando su deseo de coleccionar todas las fragancias que aman.
En resumen, la cultura del perfume ha evolucionado de un interés de nicho a una comunidad vibrante y en constante crecimiento. Con la ayuda de la tecnología y las redes sociales, los aficionados al perfume pueden ahora conectarse, compartir sus pasiones y explorar el mundo de las fragancias de manera más accesible que nunca.

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