Chevron implementa tecnología gen AI en la extracción de petróleo.

La industria del petróleo y gas genera una enorme cantidad de datos, con una sola encuesta sísmica en Nuevo México proporcionando un archivo de un petabyte. Para convertir esto en una imagen que permita tomar decisiones se requiere una operación de 100 exaflops, según Bill Braun, CIO de Chevron. Esta cantidad masiva de cómputo ha llevado a la compañía a trabajar con GPUs desde 2008, mucho antes de que otras industrias consideraran ese tipo de poder de procesamiento para cargas de trabajo complejas.

Chevron está aprovechando las últimas herramientas de inteligencia artificial generativa para obtener aún más información y valor de sus enormes conjuntos de datos. Braun afirmó que la inteligencia artificial es el complemento perfecto para empresas establecidas a gran escala con grandes conjuntos de datos. En particular, destacó el Proyecto de Petróleo y Gas en la Cuenca del Permian en Texas y Nuevo México, donde Chevron es uno de los principales propietarios de tierras.

Con aproximadamente 20 mil millones de barriles restantes, la Cuenca del Permian representa alrededor del 40% de la producción de petróleo y el 15% de la producción de gas natural en Estados Unidos. Además, es un área donde la Comisión de Ferrocarriles de Texas requiere que todos los operadores publiquen todo lo que están haciendo en el sitio, convirtiéndolo en registros públicos disponibles para competidores y empresas interesadas.

El uso de Inteligencia Artificial Generativa puede ser beneficioso en este sentido, ya que puede analizar grandes cantidades de datos y proporcionar rápidamente información valiosa. Por ejemplo, puede ayudar a analizar la geología del terreno y prevenir interferencias entre operadores en áreas cercanas.

Chevron también utiliza modelos de lenguaje grandes (LLMs) para crear estándares de ingeniería, especificaciones, boletines de seguridad y otras alertas, afinando constantemente los modelos para garantizar la precisión de la información generada. Además, la compañía está explorando formas de informar a los modelos sobre geología y equipos para generar predicciones, como identificar la ubicación de la próxima cuenca.

La empresa está comenzando a utilizar modelos robóticos, particularmente en tareas peligrosas para garantizar la seguridad de los trabajadores. Este enfoque no solo puede ser más seguro, sino también menos costoso y con menos riesgos, ya que permite a los robots realizar tareas peligrosas mientras los humanos supervisan.

Chevron ha trabajado en la integración de equipos en terreno y equipos de oficina para fomentar la colaboración y la comunicación entre ellos. Braun destacó la importancia de tener equipos interdisciplinarios que puedan comunicarse eficazmente y encontrar soluciones conjuntas, lo que ha demostrado ser altamente efectivo en el sector energético.

Asimismo, la empresa está implementando la simulación de gemelos digitales y datos sintéticos para reducir las emisiones de carbono y garantizar la eficacia del almacenamiento de CO2 a largo plazo. La compañía también está trabajando en la gestión de la energía utilizada por los centros de datos y la inteligencia artificial para minimizar su impacto ambiental.

En resumen, Chevron está aprovechando las últimas tecnologías de inteligencia artificial para optimizar sus operaciones, garantizando la seguridad de los trabajadores, mejorando la eficiencia y reduciendo su impacto ambiental.