Las autoridades han cambiado su estrategia en la búsqueda del pistolero de la autopista interestatal en Kentucky, enfocándose en reforzar las patrullas en las comunidades cercanas al lugar donde el agresor abrió fuego, impactando a una docena de vehículos y dejando cinco personas heridas.
Después de explorar 28,000 acres (11,331 hectáreas) durante 11 días, las autoridades reconocieron que no están más cerca de encontrar al presunto pistolero, Joseph Couch, de 32 años. Cientos de agentes del orden fueron asignados a los esfuerzos de búsqueda terrestre y aérea, concentrándose en un área de bosque escarpado cerca de London, una ciudad de aproximadamente 8,000 habitantes a unas 75 millas (120 kilómetros) al sur de Lexington.
«No tenemos evidencia específica o detalles que nos acerquen más a su captura en este momento», dijo el Comisionado de la Policía Estatal de Kentucky, Phillip Burnett Jr., en una actualización el martes.
El gobernador de Kentucky, Andy Beshear, añadió: «No creo que se pueda afirmar definitivamente que todavía está en el bosque, que está fuera del bosque, o que todavía está vivo». Calificó el tiroteo como un «acto de violencia y maldad» y señaló que el plan ahora es reforzar la seguridad en las comunidades locales con la esperanza de calmar los temores entre los residentes.
La policía ha recibido más de 400 pistas desde el tiroteo del 7 de septiembre en la Interestatal 75, la mayoría apuntando a áreas fuera del extenso bosque, según Burnett. Se decidió reasignar a los agentes del bosque a las comunidades para reforzar la seguridad mientras la gente reanuda sus vidas.
«En el día 11, sabemos que llevar a los agentes del bosque a las comunidades dará la mejor garantía a nuestros ciudadanos de que si todavía está ahí fuera, estamos aquí contigo, donde vas a la escuela, donde vas a la iglesia», dijo Beshear.
Los residentes, como Heather Blankenship, han acogido con agrado las patrullas policiales adicionales, citando la ansiedad que ha sentido al conducir por la zona desde el tiroteo en la autopista.
«Abrir los ojos en los acantilados, eso no es normal», dijo por teléfono. «Mirar hacia los árboles, eso no es normal. Pensar que alguien podría simplemente atacarte en un abrir y cerrar de ojos, cuando estás conduciendo de un punto A a un punto B. No deberías tener ese tipo de miedo en América».
Las escuelas reabrieron el martes con seguridad adicional en el condado donde ocurrió el tiroteo. Los administradores del distrito escolar trabajaron con la policía en el plan de reapertura, que brinda refuerzo de seguridad para los autobuses, los campus escolares y las actividades extracurriculares.
La policía incrementó las patrullas a lo largo de la mayoría de las rutas rurales de autobuses en el distrito escolar del sureste de Kentucky, según un mensaje en el sitio web del distrito. Se instó a los padres a mantener a sus hijos en el interior, si es posible, hasta que llegara el autobús. Las fuerzas del orden aumentaron su presencia para vigilar cada campus escolar y se intensificaron las patrullas para los eventos después de clases.
A medida que los buscadores intentan localizar al sospechoso, la policía ha instado a los residentes del área a estar atentos y cuidar de sus vecinos. Cámaras colocadas en el bosque permitirán a las autoridades vigilar la zona en caso de que Couch aún esté oculto allí.
Burnett enfatizó que la nueva estrategia era una redistribución de personal, no una reducción. El objetivo principal sigue siendo el mismo: encontrar al sospechoso.
«Nosotros no descansaremos hasta que el Sr. Couch sea llevado bajo custodia», dijo el Sheriff del Condado de Laurel, John Root.
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