Redacción - El Semanal
A tan solo 100 días de las elecciones en Estados Unidos, y con la reciente noticia de la salida del presidente Joe Biden de la contienda, la vicepresidenta Kamala Harris ha recaudado la asombrosa cifra de 200 millones de dólares y ha conseguido 170,000 voluntarios para su campaña electoral.
Sin embargo, ¿qué podemos esperar en los próximos días previos a las elecciones? Para los demócratas, a pesar de que la Convención Nacional Demócrata se llevará a cabo en Chicago a finales de agosto, muchos estarán atentos a lo que suceda el 7 de agosto.
Ese día, la vicepresidenta Harris se convertirá oficialmente en la candidata del partido Demócrata, durante una reunión virtual donde los delegados podrán votar virtualmente antes de la convención para cumplir con los plazos estatales y asegurar su presencia en las papeletas de los 50 estados.
Esta reunión virtual también revelará quién acompañará a Harris como candidato a la vicepresidencia en la boleta oficial del partido Demócrata.
Una encuesta reciente del AP-NORC Center for Public Affairs Research reveló que aproximadamente seis de cada diez demócratas creen que Harris sería una buena presidenta, lo que indica un creciente apoyo a su candidatura.
Antes de que Biden retirara su candidatura a la reelección, varios miembros destacados del partido le sugirieron que se apartara de la contienda tras su desempeño desastroso en un debate con el posible candidato republicano, el ex presidente Donald Trump, el 27 de junio.
La periodista Avis Jones-DeWeever mencionó que este fue un momento complicado para los liberales estadounidenses, con donantes advirtiendo que dejarían de financiar la campaña y celebridades como George Clooney expresando en un artículo en el New York Times la incapacidad de Biden para un segundo mandato. Sin embargo, la candidatura de Harris ha revitalizado al partido Demócrata.
De acuerdo con The Wall Street Journal, la carrera entre Harris y Trump está «virtualmente empatada», con una ligera ventaja de dos o tres puntos porcentuales para el ex presidente en las encuestas.
En cuanto a los próximos pasos de Trump, es fundamental que reconsidere su estrategia de comunicación, ya que, a pesar de liderar las encuestas, la ventaja es mínima y el impulso parece favorecer a la campaña de Harris.
Los líderes republicanos han advertido a sus miembros que eviten los ataques basados en racismo y sexismo hacia Harris, instando a centrarse en las críticas a las políticas de la administración Biden-Harris. Además, la elección del vicepresidente JD Vance podría estar obstaculizando el alcance de Trump con los votantes potenciales.
La incógnita ahora es si Trump debatirá con Harris el 10 de septiembre, algo que la vicepresidenta actual acusó al ex presidente de «echarse atrás». Por su parte, el equipo de Trump ha declarado que no se comprometerá a un debate con Harris hasta que el Partido Demócrata elija oficialmente a su candidata.
En definitiva, los próximos días prometen ser decisivos en la campaña electoral estadounidense, con un escenario político cada vez más incierto y emocionante.
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