La Vicepresidenta de los Estados Unidos, Kamala Harris, y su compañero de fórmula, el Gobernador de Minnesota Tim Walz, están dando inicio a una gira en autobús de dos días en Georgia este miércoles, que recorrerá áreas rurales en la parte sur del estado antes de culminar en un gran mitin en la ciudad costera de Savannah.
El ticket demócrata se reunirá con simpatizantes, personal de campaña, propietarios de pequeñas empresas y votantes. El partido cree que para ganar el estado crítico de Georgia sobre el republicano Donald Trump en noviembre, necesitan más que Atlanta y los suburbios que apoyaron a Joe Biden en 2020, y también deben avanzar, aunque sea un poco, en bastiones republicanos.
El viaje a Georgia es una visita pendiente desde principios de mes, cuando la dupla tenía previsto emprender una gira de siete estados para presentar la nueva fórmula demócrata. Las etapas en Carolina del Norte y Georgia fueron canceladas debido a la tormenta tropical Debby.
Además de la gira en autobús y el mitin del jueves, Harris y Walz se sentarán con la presentadora de CNN Dana Bash para su primera entrevista conjunta. La entrevista se emitirá el jueves por la noche.
La estrategia demócrata de captar votos en partes republicanas del estado ha tenido cierto éxito en el pasado. Raphael Warnock, el primer senador negro de Georgia, fue reelegido en 2022 con casi tres puntos porcentuales de ventaja, mientras que Joe Biden ganó Georgia solo por un cuarto de punto porcentual unos dos años antes, en parte, adentrándose en las áreas más conservadoras, impulsado en parte por operativos que ahora forman parte del equipo de campaña de Harris.
Harris tiene otra campaña intensiva en el Día del Trabajo con el Presidente Biden en Detroit y Pittsburgh, faltando poco más de 70 días para las elecciones. Las primeras papeletas por correo se enviarán a los votantes en solo dos semanas.
En Georgia, el Gobernador republicano Brian Kemp parece haber dejado atrás los ataques de Trump en un mitin en el estado hace algunas semanas, diciendo que fue una «pequeña distracción que ya es cosa del pasado».
En vísperas de la visita de Harris, Kemp dijo a Fox News: «No estoy seguro exactamente de lo que sucedió en el mitin. He escuchado diferentes historias y explicaciones de las personas sobre lo sucedido».
En el mitin, Trump criticó al gobernador, culpándolo por su estrecha derrota en el estado en 2020. En una diatriba de aproximadamente 10 minutos, Trump arremetió contra Kemp por no ceder a sus teorías falsas de fraude electoral. También culpó al gobernador por no impedir que un fiscal del distrito local lo procesara a él y a otros por sus esfuerzos por revertir los resultados en el estado.
La semana pasada, Trump cambió su tono, agradeciendo al gobernador en una publicación en redes sociales por toda su «ayuda y soporte en Georgia, donde una victoria es tan importante para el éxito de nuestro partido y, lo que es más importante, para nuestro país».
Kemp dijo en Fox que los republicanos «deben decir a la gente por qué deberían votar por nosotros, qué vamos a hacer para mejorar las cosas. Y hay una serie de temas en los que creo que podríamos contrastar a Kamala Harris y su historial».
«Para mí, eso es en lo que necesitamos enfocarnos, no en un enfrentamiento de hace dos o tres semanas».
Mientras tanto, la campaña de Harris lanzó un nuevo anuncio en los estados clave, buscando asociar a Trump con el conservador «Proyecto 2025».
El primer anuncio afirma que Trump está «buscando control» sobre los votantes, yuxtapone citas de Trump con capturas de pantalla ominosas del plan. Forma parte de los 370 millones de dólares en reservas de publicidad digital y televisiva de Harris entre el Día del Trabajo y el Día de las Elecciones.
Liderado por la Heritage Foundation, un grupo de reflexión conservador, el Proyecto 2025 es un detallado manual de 920 páginas para gobernar bajo la próxima administración republicana, que incluye la destitución de miles de funcionarios públicos y su reemplazo por leales a Trump, y revertir la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos de medicamentos utilizados en abortos.
Trump ha intentado distanciarse del Proyecto 2025, aunque fue redactado por antiguos aliados y exfuncionarios de la administración de Trump. El mes pasado, publicó en redes sociales que no había visto el plan, no tenía «idea de quién está a cargo de él y, a diferencia de nuestra Plataforma Republicana muy bien recibida, no tuvo nada que ver con él».
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