Redacción - El Semanal
El presidente de Nigeria culpa a una «agenda política» por la violencia y protestas
ABUJA, Nigeria –
El líder de Nigeria hizo un llamado el domingo para poner fin a las protestas masivas por las dificultades económicas, afirmando que las manifestaciones se han vuelto violentas y culpando «a unos pocos con una agenda política» por impulsarlas. Sin embargo, las protestas continuaron por cuarto día en algunos lugares, incluyendo en el centro económico de Lagos.
Las protestas, que comenzaron el jueves, han estado acompañadas de informes de saqueos y vandalismo, así como acusaciones de que las fuerzas de seguridad han utilizado fuerza excesiva. Amnistía Internacional ha reportado la muerte de nueve manifestantes en enfrentamientos con la policía, mientras que otros cuatro murieron por una bomba. La policía nigeriana negó el informe de Amnistía.
«He escuchado alto y claro», dijo el presidente Bola Tinubu en sus primeras declaraciones públicas sobre las manifestaciones. «Entiendo el dolor y la frustración que impulsan estas protestas, y quiero asegurarles que nuestro gobierno está comprometido a escuchar y abordar las preocupaciones de nuestros ciudadanos».
Sin embargo, afirmó que «unos pocos con una clara agenda política para dividir esta nación» serían resistidos por las fuerzas de seguridad.
Las declaraciones de Tinubu fueron criticadas por algunos que dijeron que no abordó los problemas que desencadenaron las protestas. Fue una «oportunidad perdida» en la que el líder nigeriano «se alejó de los problemas subyacentes y no proporcionó un plan o metas claras para abordarlos», dijo la firma de investigación SBM Intelligence con sede en Lagos en su evaluación.
Las protestas reflejan la frustración con la peor crisis de costos de vida en una generación y acusaciones de mal gobierno y corrupción en el país más poblado de África, un importante productor de petróleo donde los enormes ingresos de los funcionarios públicos contrastan con los altos niveles de pobreza y hambre.
Los ayudantes de Tinubu han dicho que las protestas están motivadas políticamente. Su elección el año pasado fue disputada por la oposición, después de que ganó con el 37 por ciento de los votos, el margen más pequeño de cualquier presidente nigeriano. Las elecciones también registraron la participación más baja desde 1999, cuando el país volvió a la democracia.
Los manifestantes también han sido inspirados por otros jóvenes en Kenia que realizaron manifestaciones el mes pasado para oponerse a un aumento de impuestos planificado.
El líder nigeriano dijo que su gobierno «no permanecerá impasible» y permitirá que continúen los saqueos reportados en los últimos días.
«En estas circunstancias, insto a los manifestantes y a los organizadores a suspender cualquier otra protesta y dar espacio para el diálogo», dijo.
El ejército también ha amenazado con intervenir para sofocar la violencia.
Tinubu defendió las audaces reformas que se suponía que ahorrarían al gobierno dinero y fortalecerían la disminución de la inversión extranjera, pero cuyo impacto inmediato ha añadido dificultades.
Las reformas, incluyendo la suspensión de subsidios de gas con décadas de antigüedad y devaluación de la moneda, han tenido un efecto dominó en el precio de casi todo debido a que han sido implementadas deficientemente, sostienen los analistas.
«La economía se está recuperando; por favor, no le corten su oxígeno», dijo Tinubu.
En una región que ha sido testigo de golpes militares rampantes debido al descontento popular con los gobiernos democráticamente elegidos, el líder nigeriano advirtió que las protestas también podrían amenazar la democracia del país.
«¡Siempre hacia adelante, nunca hacia atrás!», expresó.
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