Redacción - El Semanal
En medio de la agitada escena política de Estados Unidos, líderes nacionalistas cristianos están difundiendo la idea de que la Vicepresidenta Kamala Harris está bajo la influencia de un «espíritu de Jezabel», un término con raíces profundamente racistas y misóginas que ha generado preocupación entre expertos religiosos y políticos.
El concepto se basa en la historia bíblica de la malvada reina Jezabel, quien persiguió a los profetas y fue castigada con una muerte horrible. Durante la esclavitud y a lo largo de la historia de Estados Unidos, el término «Jezabel» se utilizó para describir a las mujeres negras, representándolas como sexualmente provocativas y poco confiables.
Dentro del contexto del «espíritu de Jezabel,» el término adquiere connotaciones siniestras, sugiriendo que la persona está bajo la influencia de demonios en una batalla espiritual entre el bien y el mal. Expertos que han estudiado la insurrección del 6 de enero advierten que retórica similar sobre la guerra espiritual llevó a muchos al Capitolio de los Estados Unidos ese día.
Según Anthea Butler, profesora de la Universidad de Pensilvania y autora del libro «Racismo Evangélico Blanco,» el término es un lenguaje codificado para comunicar que la persona –generalmente una mujer demócrata, negra o multirracial– no es una candidata aceptable. A pesar de que Harris es cristiana y baptista, cuando líderes religiosos la relacionan con Jezabel, Butler señala que sugiere falsamente que no es cristiana.
La utilización de este término proviene de un movimiento politizado del cristianismo carismático llamado la Nueva Reforma Apostólica, cuyos líderes enseñan ampliamente que fuerzas demoníacas intervienen en la guerra espiritual y pueden hablar a través de las personas. En este caso, el espíritu de Jezabel es un demonio que actúa en la Tierra y posee las cualidades de la Jezabel bíblica.
Este lenguaje se emplea para movilizar a los cristianos con sensibilidades apocalípticas, con mensajes que indican que la próxima elección es «hacer o morir.» Algunas personas podrían utilizar esta retórica militante para justificar violencia real, señala Matthew Taylor, autor del libro «The Violent Take It By Force,» que detalla la influencia de la Nueva Reforma Apostólica en la insurrección del 6 de enero.
La cristianismo nacionalista es una fusión de identidades americana y cristiana que busca un lugar privilegiado para el cristianismo en la vida pública estadounidense. Este movimiento ha tenido un impacto significativo en la política estadounidense desde la insurrección.
En medio de esta polémica, líderes religiosos continúan utilizando terminología cargada para describir a figuras políticas prominentes, lo que alimenta enfrentamientos ideológicos y religiosos en el país. La retórica del «espíritu de Jezabel» pone de manifiesto las tensiones existentes y la influencia de la religión en la esfera política estadounidense.
A medida que el país se prepara para futuras elecciones y enfrenta divisiones profundas, el discurso religioso seguirá desempeñando un papel crucial en la configuración de la narrativa política y social en Estados Unidos.
¿¿¿Cómo es posible que acusen a Kamala Harris de tener espíritu de Jezabel??? No entiendo cómo llegan a esa conclusión tan descabellada. Necesito más información para entender este argumento tan extraño. ¡Por favor aclaren este punto!
Menuda locura de acusaciones, ¿no? Estoy flipando con lo extremo que puede llegar el fanatismo religioso. Acusar a Kamala Harris de tener espíritu de Jezabel suena a algo sacado de una película de terror. A veces me pregunto si estas personas viven en la misma realidad que el resto de nosotros. Es importante debatir sobre política, pero esto ya es pasarse de la raya. ¡Qué mundo más raro nos ha tocado vivir!