Redacción - El Semanal
Un hombre japonés desafía las convenciones sociales al protagonizar una historia tan singular como controvertida. Watanabe Ryuta, residente en Sapporo, Hokkaido, se ha convertido en el foco de atención al proclamarse como el «Dios del matrimonio», con cuatro esposas y dos novias a sus 35 años. Esta atípica situación ha despertado múltiples interrogantes en la sociedad japonesa, desafiando las normas establecidas y generando un intenso debate sobre la diversidad de modelos familiares alternativos.
La vida de Watanabe transcurre en un constante estado de controversia. Con diez hijos y una década sin empleo, el sustento económico de su hogar recae en las contribuciones financieras de sus esposas y novia, quienes solventan los gastos mensuales con un ingreso conjunto de 914.000 yenes. Este estilo de vida poliamoroso, donde las relaciones se basan en acuerdos de convivencia no legalmente reconocidos, plantea desafíos legales y éticos en una sociedad donde la poligamia ha sido prohibida desde el período Meiji.
La estructura familiar de Watanabe se sostiene en la convivencia a largo plazo, donde cada esposa dispone de su propia habitación y comparte una «relación rotativa» con él. A pesar de la peculiaridad de su situación, el protagonista asegura que no hay celos entre sus parejas y que mantienen una convivencia armoniosa, en la que él asume roles tradicionalmente asociados a la mujer, como las tareas del hogar y el cuidado de los niños.
La ambición de Watanabe va más allá de desafiar las normas sociales actuales. Con el objetivo de superar el récord de 53 hijos y emular la figura histórica de Tokugawa Ienari, busca consolidar su posición como el «Dios del matrimonio» al alcanzar la cifra de 54 descendientes. Sin embargo, este plan se ve obstaculizado por las leyes que prohíben la poligamia en Japón, generando un dilema entre sus aspiraciones personales y las restricciones legales vigentes.
La historia de Watanabe resuena en un país marcado por una crisis demográfica y un envejecimiento acelerado de la población. Mientras miles de escuelas cierran sus puertas y se implementan iniciativas poco convencionales para fomentar la repoblación de las zonas rurales, la búsqueda de un récord de descendientes se antoja como un relato surrealista en medio de una realidad demográfica cada vez más preocupante.
La controversia que rodea la vida de Watanabe plantea cuestionamientos profundos sobre la diversidad familiar, la legalidad de las uniones poliamorosas y los límites de la libertad individual en una sociedad en constante transformación. Su historia, más allá de ser un caso aislado, pone de manifiesto las complejidades y contradicciones de una sociedad que enfrenta desafíos demográficos y culturales sin precedentes.
GIPHY App Key not set. Please check settings